El candidato presidencial asesinado, Fernando Villavicencio, en un mitin minutos antes de ser asesinado
Ni Sánchez ni Yolanda Díaz han condenado todavía el asesinato del candidato presidencial de Ecuador
José Manuel Albares y Miquel Iceta son los únicos miembros del Gobierno que han lamentado el crimen, aunque el resto de los ministros sí ha escrito en redes sociales sobre temas de lo más variado
Después de más de veinticuatro horas desde que asesinaran al candidato a la presidencia de Ecuador, Fernando Villavicencio, ni el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ni la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, han condenado el atroz crimen. En sus respectivos perfiles de Twitter, ninguno de los dos dirigentes, como suelen hacer, han hecho mención al suceso. Sin embargo, este hecho no quiere decir que hayan estado ausentes y sin utilizar las redes sociales, ya que sí han escrito sobre temas de lo más variopinto.
Así, en los últimos días, el jefe del Ejecutivo ha lamentado «con enorme pesar» el fallecimiento del exciclista Federico Martín Bahamomtes, destacando su «legado» y agradeciéndole su inspiración para «pedalear más allá de los límites». Sus dos últimos tuits han sido sobre el mismo tema, la violencia machista. Por ello, ha mostrado todo su «cariño» a los «familiares y amigos» de las mujeres que recientemente han sido asesinadas a manos de sus parejas en Santa Cruz de Tenerife, Almería y Córdoba. Pero, al menos de momento, ninguna alusión al asesinato.
Tampoco se ha hecho eco Yolanda Díaz. En la misma red social, la titular de Trabajo ha reivindicado la figura de las limpiadoras de hoteles, comúnmente conocidas como kellys, haciendo un alegato en favor de sus «derechos laborales» y defendiendo que la salud en el trabajo «debe ser siempre una prioridad». También ha tenido tiempo a lo largo de esta misma mañana para referirse a la subida de la inflación. Para la líder de Sumar, esta ha venido «derivada del precio de los carburantes y los alimentos», a la par que ha hecho un llamamiento a «actuar sobre los márgenes empresariales y proteger a la ciudadanía» frente a un incremento del 31% en el coste de la cesta de la compra «desde antes de las pandemia».
Díaz menciona la muerte de Blas Infante
Lo llamativo de la vicepresidenta segunda del Gobierno es que ayer mismo sí puso de relieve un asesinato, aunque no fue el de Villavicencio. En este caso, fue el de Blas Infante, padre del nacionalismo andaluz, en el 87 aniversario de su muerte. Díaz lo calificó como el «padre de la patria andaluza» y lamentó que sus restos «siguen sin un entierro digno como los más de 140.000 desaparecidos del franquismo». Para ellos reclamó «memoria, justicia y reparación», pero ni rastro de una mínima condolencia por el suceso en Ecuador.
En cuanto al Gobierno en general, solo dos miembros de los veintitrés que lo componen han condenado los hechos. Además de Sánchez y Díaz, ninguna de las otras vicepresidentas, Nadia Calviño y Teresa Ribera, lo han hecho. Siguiendo el orden protocolario de las carteras, el primero en mentar la matanza ha sido el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. Lo ha realizando haciendo un retuit a una publicación de la cuenta oficial del Ministerio en la que «lamenta y condena» el crimen, a la par que subraya que España apoya «el proceso electoral de Ecuador, su democracia y a las autoridades para que se investigue esta trágica muerte y se juzgue a los culpables».
Fernando Villavicencio, en una imagen de archivo
Junto a Albares, el único ministro de Sánchez que ha mostrado públicamente repulsa por lo acontecido ha sido el responsable de Cultura, Miquel Iceta. También desde su perfil en Twitter, el catalán ha compartido el enlace a un reportaje que ha acompañado con el siguiente texto: «El asesinato de un candidato a presidente en Ecuador pone en evidencia la espiral de violencia que devora al país».
Aparte de Albares e Iceta, nadie del Gobierno ha escrito sobre el tema, independientemente de que estos sean del ala socialista o de la cuota de Unidas Podemos. En cambio, sí han escrito acerca de temas de lo más variado. Por ejemplo, el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha escrito últimamente sobre la conmemoración del centenario de la muerte del pintor Joaquín Sorolla.
En esta línea, la titular de Asuntos Sociales, Ione Belarra ha aludido a la excavación de restos humanos en una fosa común de la época franquista, mientras que la responsable de Hacienda, María Jesús Montero, ha publicado un homenaje a las 13 Rosas. Resulta chocante que ni Isabel Rodríguez ni Pilar Alegría hayan hecho mención alguna al asesinato de Villavicencio, puesto que la primera es la portavoz del Gobierno y la segunda lo es del Partido Socialista.
