Sánchez, que sí mandó su «cariño y solidaridad» a Kirchner, sigue sin condenar el asesinato a Fernando Villavicencio
El presidente del Gobierno apenas tardó unas horas en mostrar su repulsa ante el intento de asesinato que sufrió la dirigente argentina, mientras se mantiene en silencio con el magnicidio del opositor ecuatoriano
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, sigue sin condenar el asesinato del candidato a la presidencia de Ecuador Fernando Villavicencio tres días después de que se cometiera el crimen. Aunque el jefe del Ejecutivo oficialmente está de vacaciones, el asueto veraniego no le ha impedido publicar mensajes en sus redes sociales sobre otros temas de actualidad. Así, en los últimos días ha utilizado su perfil en Twitter para escribir recordando la figura del exciclista fallecido Federico Martín Bahamontes o mostrar su solidaridad con los «familiares y amigos» de las últimas mujeres asesinadas por violencia machista.
Sin embargo, a pesar de la gravedad del magnicidio y de la trascendencia política y mediática que ha tenido, el líder socialista todavía no ha expresado muestra alguna de condolencia, un aspecto que llama poderosamente la atención no solo por su cargo institucional en España, sino porque además ostenta la presidencia rotatoria de la Unión Europea. Por si fuera poco, Josep Borell, en nombre de la Comisión Europea que lidera la alemana Ursula Von der Leyen, sí que se ha referido al suceso, calificándolo como un «trágico acto de violencia» que supone «un ataque contra las instituciones y la democracia en Ecuador».
La actitud silente de Sánchez contrasta por completo con la que tuvo hace algo menos de un año, cuando la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, sufrió un intento de asesinato en un acto público en el que uno de los asistentes le intentó disparar sin éxito, ya que la pistola se encasquilló y la dirigente salió ilesa. Tan solo a las pocas horas de producirse, el presidente del Gobierno subió a Twitter un mensaje con el siguiente texto:
«Mi cariño y solidaridad, Cristina Fernández de Kirchner. Nuestra rotunda condena a este intento de magnicidio y el apoyo a la vicepresidenta Cristina Fernández y a todo el pueblo argentino. El odio y la violencia jamás vencerán a la democracia». Ahora, por el contrario, no ha habido ninguna mención al fallecido, a sus familiares, al pueblo ecuatoriano, al odio, a la violencia ni a la democracia.
Siguiendo esta línea de silencio sepulcral ante un crimen que ha conmocionado al mundo entero, tampoco Yolanda Díaz ha dicho nada. Al igual que Sánchez, la líder de Sumar también se apresuró a condenar el ataque a Kirchner, a quien le brindó poco después de que se conociera la noticia «toda» su «solidaridad» no solo a ella, sino también a todo «el Gobierno y el pueblo argentino», mostrándose «convencida» de que este sabría «avanzar en paz y con diálogo». Terminó su mensaje mandando «un abrazo desde España».
Respecto a Villavicencio, la vicepresidenta segunda del Gobierno continúa obviando el tema, como si no hubieran matado al opositor ecuatoriano a escasos días de las elecciones en el país latinoamericano. En cambio, sí ha escrito para subrayar su «cariño a las personas cercanas» a un trabajador que falleció el viernes en el municipio cordobés de Montilla durante la vendimia y con alerta roja por el calor en la zona.
Igualmente, ha enviado su «enhorabuena» a la selección femenina de fútbol por clasificarse para las semifinales del Mundial, a cuyas integrantes les agradeció «hacernos disfrutar del buen fútbol», definiéndolas como «la ilusión de todo un país». Pero, de nuevo, no ha mandado mensaje alguno, ni personal ni institucionalmente, que tenga que ver con el asesinato de Villavicencio.