El aval del Constitucional permite un alud de promesas y juramentos de fuera de la norma

La nueva presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, ha afirmado que «vamos a proceder a la promesa o juramento de acatamiento de la Constitución de todos los miembros de la cámara en los términos previstos en el reglamento de la misma y en la resolución de la presidencia de 30 de noviembre de 1989».

Según dicha resolución, "la promesa o juramento de acatamiento a la Constitución prevista en los artículos 4 y 20 del Reglamento del Congreso de los Diputados se efectuará de la siguiente manera: El Presidente preguntará al Diputado que haya de prestarlo: «¿Juráis o prometéis acatar la Constitución?» Dicha pregunta será contestada mediante la expresión «Sí, juro» o «Sí, prometo».

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Bajo esta premisa, PP y Vox han denunciado los juramentos empleados sobre todo por nacionalistas e independentistas como ya lo hicieron varios diputados en la constitución de las Cortes pasadas en 2019. Sin embargo, el Tribunal Constitucional ha emitido hace tan solo dos meses una resolución que ha otorgado seguridad jurídica al chorreo de fórmulas empleadas en la toma de posesión de los diputados y senadores que han ocupado este jueves sus escaños.

Las fórmulas

Incluso antes de que lo anunciara públicamente Francina Armengol, ya ha permitido el empleo del euskera cuando los diputados de Bildu han prometido su cargo «por imperativo legal y hasta alcanzar la república vasca, sí prometo» seguido de su habitual «por imperativo legal». Han utilizado una fórmula muy similar a la empleada por los independentistas catalanes ya que ERC han prometido su cargo «Por imperativo legal y hasta la consecución de la república catalana, sí prometo». La fórmula empleada por los nacionalistas de Junts ha sido el interminable «Con lealtad al pueblo de Cataluña y a su mandato del 1 de octubre, y comprometido con la defensa de todos los represaliados y exiliados, por imperativo legal, prometo».

Casi como si fuera una forma de contrarrestar tanto independentismo, los diputados de Vox también se han salido de la normativa estricta y han jurado sus cargo «por España. Y como si pretendiera aunar todas las fórmulas extra normativas, la diputada de Sumar y secretaria segunda de la Mesa, Esther Gil de Reboleño, ha prometido su cargo »por una España plural y feminista".

Qué dijo el Constitucional

Francina Armengol ha dado por buenas todas estas fórmulas aludiendo a la resolución del Constitucional, que el pasado mes de junio afirmó que estas fórmulas son válidas porque no vulneran los derechos del resto de diputados ya que no suponía un trato desigual entre diputados.

Así, la sentencia del Constitucional consideraba que «el Tribunal no constata que la decisión parlamentaria impugnada y la supuesta composición incorrecta del Congreso que, según los demandantes, habría conllevado limitación o restricción alguna a la posibilidad de que estos, de manera plena y a lo largo de aquella legislatura, hubieran podido desarrollar con toda normalidad los derechos y facultades propios del cargo al que han accedido tanto en lo referido, en aquel momento, a constituir grupo parlamentario propio como, en el devenir de su mandato representativo, a la presentación de iniciativas ante la Cámara, el debate en su seno y, en su caso, el pronunciamiento de aquella sobre las mismas o eventuales actuaciones de control de la acción de gobierno».

De igual modo, señalaba que «el Tribunal no aprecia que la decisión de la presidenta del Congreso de los Diputados de aceptar la validez de la fórmula de acatamiento de la Constitución utilizada por la totalidad de los diputados electos asistentes a la sesión constitutiva de la XIII Legislatura suponga un trato desigual entre los diputados, ya que fueron validadas todas las respuestas emitidas a la pregunta general efectuada a cada diputado sobre si juraban o prometían acatar la Constitución».

Sobre este argumentario, la nueva presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, ha admitido todas las fórmulas empleadas por los diputados.