La razón detrás del acercamiento del PP a Junts: encarecer la investidura de Sánchez

A un mes de la sesión de investidura de Alberto Núñez Feijóo, el líder del Partido Popular mantiene su intención de hablar con todos los grupos parlamentarios a excepción de Bildu. Con ello, el candidato del PP pretende, entre otras cosas, encarecer la investidura de Pedro Sánchez y que la repetición electoral esté más cerca.

«Sánchez no va a estar tranquilo hasta que Junts nos diga que no», opinan fuentes cercanas al presidente popular que sostienen que las conversaciones con el partido separatista pueden provocar que sus condiciones para apoyar una investidura del candidato del PSOE se endurezcan.

Por el momento, Junts no ha expresado su «no» rotundo al PP como sí lo han hecho otros partidos como el PNV. Tampoco se han posicionado a favor de investir al candidato socialista. «¿Por qué Sánchez no le dijo al Rey que tiene el apoyo de Junts? Porque no lo tiene», apuntan desde Génova, donde defienden que la «política es así» y que no pueden «vetar» a dicho partido como tampoco lo hacen con ERC.

Sin embargo, los populares creen que mantener en el candelero a la formación de Carles Puigdemont puede complicar las negociaciones de los separatistas con Sánchez o, al menos, encarecerlas. «Si Junts tiene dos opciones, aunque nosotros les digamos que 'no', pueden pedir un extra al PSOE», argumentan. «Ellos pueden usar ese elemento de presión y subir el precio», añaden.

Además, la estrategia del PP destaca que decir que no a las exigencias de Junts «mejora el relato» de Feijóo: «Si no sacamos adelante la investidura, podremos decir que no lo hacemos porque no cedemos ante las presiones de los separatistas como sí hace Sánchez», añaden. En este sentido, las mismas fuentes subrayan que puede que estas cesiones se conviertan en «impagables» para el actual presidente en funciones y, por lo tanto, se produzca un adelanto electoral.

De esta manera se daría el escenario más interesante para el Partido Popular, que ve «complicadísimo» que Feijóo sea investido, pero mantiene la esperanza en mejorar el resultado si los españoles tuviesen que acudir a las urnas de nuevo. El PP cree que su negativa a ceder ante los separatistas les puede procurar un trasvase de voto socialista.

Críticas internas

El líder del PP en Cataluña, Alejandro Fernández, no coincide en la insistencia de su partido para mantener a Junts en sus conversaciones.

Fernández manifestó en redes sociales que el partido de Puigdemont «sí» era «su rival» al ser un partido cuya «tesis esencia es que España es una dictadura dirigida por un Rey fascista». «Que alguien me diga de qué hay que hablar con ellos», se preguntaba.

Fuentes del PP reconocen que «Junts no es un aliado del PP» y que en esto «están de acuerdo». Sin embargo, mantienen la necesidad de hablar con los distintos grupos parlamentarios para intentar llegar a un consenso mayor y para poder escuchar las peticiones y, posteriormente, rechazarlas.