Luis Rubiales pone a la venta su ático de 1,5 millones tras quedarse sin los sueldos de la Federación y la UEFA

El presidente suspendido de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ha puesto a la venta el ático de 1,5 millones de euros en el que reside ubicado en el centro de Madrid. Esta decisión, que ha trasladado a su entorno más próximo en los últimos días, se debe a la merma de sus ingresos económicos. Desde que fue suspendido por la FIFA en la Federación ha dejado de percibir su sueldo y, por este motivo, no puede continuar haciendo frente al pago mensual de la hipoteca del inmueble.

Tal y como ha podido saber El Debate en exclusiva, Rubiales trasladó a comienzos de la semana pasada a su entorno su decisión de deshacerse del inmueble cuanto antes. Tanto es así que ha pedido a sus amigos más próximos que consulten si puede haber alguien interesado. La decisión de Rubiales se ha debido, por un lado, a la eliminación de sus honorarios. Y, por otro, porque, según su entorno, se siente acosado al haber prensa de manera diaria en las inmediaciones del portal de su domicilio.

Este periódico ha tenido acceso en exclusiva a los tres préstamos hipotecarios que Rubiales pidió al banco hace tres años para hacer frente a la compra del inmueble. El primero de ellos, para la compra del piso, fue de 1.473.576 euros. Los otros dos, de 43.212 euros cada uno, son para abonar las dos plazas de garaje que también compró. En total, 1.560.000 euros que Rubiales se comprometió a devolver el 5 de mayo de 2051. Es decir, que de haber seguido con la hipoteca, Rubiales, que ahora tiene 46 años, tendría que estar pagando el ático hasta los 74 años.

Rubiales adquirió el ático, ubicado en la calle Ferraz de Madrid, en mayo de 2021. Un inmueble de lujo situado a escasos metros del Templo de Debod que cuenta con una superficie, según un informe del Catastro al que ha tenido acceso El Debate, de 200 metros cuadrados. A parte de la vivienda, el piso cuenta con una amplia terraza de 100 metros cuadrados en la que hay una piscina. Las calidades del inmueble son de los más exclusivas: electrodomésticos de vanguardia, domótica de alta tecnología, calefacción mediante suelo radiante, etc.

Rubiales ha dejado de percibir dos sueldos. El de la Federación, cuyos emolumentos ascendían hasta los 675.761 euros anuales, y los de la UEFA, de donde cobraba 250.000 euros al año. Por el momento, el presidente suspendido de la RFEF no cobrará durante los noventa días que dura la suspensión. En el momento en que el plazo se cumpla, a finales de este año, se dictará una resolución en la que se dará a conocer si sigue cobrando de ambas entidades o, por el contrario, continúa sin recibir los honorarios.

Presiones del Gobierno

El pasado 1 de septiembre, el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD) decidió abrir un expediente Rubiales tras ser denunciado por el Consejo Superior de Deportes (CSD) por infracción «grave» y no «muy grave». Un matiz relevante porque el Gobierno esperaba que fuera «muy grave» para, a través del CSD, poder decretar la suspensión provisional de forma cautelar de Rubiales.

Tras conocerse la resolución del TAD, el ministro de Cultura y Deportes en funciones, Miquel Iceta, lamentó la decisión del tribunal de no considerar los actos de Rubiales como «muy graves», unos hechos que el Gobierno sigue defendiendo que sí lo fueron. «Creemos que son muy graves, si el TAD lo hubiera considerado así, el propio CSD podría haber suspendido a Rubiales. Como no lo ha hecho, le corresponde hacerlo al tribunal, y nosotros, desde este mismo momento y a través de un escrito que presentaremos con inmediatez, así lo vamos a solicitar», explicó Iceta.

El mismo día de la resolución, Rubiales emitió un comunicado en el que acusó al Gobierno de «no garantizar la separación de poderes» y de presionar en su contra. «Me preocupa especialmente que, algunos de quienes deben proclamar y contribuir a garantizar la separación de poderes en nuestro país, se empeñen en tomar parte y presionar en mi contra en lugar de dejar que la justicia actúe con todas las garantías, manteniéndose al margen», afirmaba.

También denunció haber sufrido «un linchamiento político y mediático sin precedentes del que me he mantenido totalmente al margen, no solo a nivel nacional sino mundial». De la misma manera, aclaró que colaborará con los organismos que le requieran para resolver la situación en la que se encuentra: «Seguiré colaborando en todos los ámbitos para que se llegue hasta el final en todo esto. En este sentido, también he acudido al procedimiento abierto por FIFA para defender mi postura. Y seguiré en todos aquellos otros, en los que pueda demostrar mi honorabilidad», concluyó.