Investidura
La delegación de Santos Cerdán amplía noches de hotel en Bruselas porque la negociación con Junts no avanza
Al PSOE se le complica la recta final para investir a Pedro Sánchez presidente con un Puigdemont que no cede a la presión
El equipo socialista encargado de las negociaciones con los separatistas catalanes de Junts, dirigido por Santos Cerdán, amplía noches de hotel en Bruselas ante la dilatación de las negociaciones sobre la amnistía para apoyar la investidura de Pedro Sánchez.
Los socialistas se alojan en el céntrico Hotel Sofitel en la conocida Place Jourdan, apenas unos cientos de metros detrás del Parlamento Europeo. Muy cerca, en el Press Club de la capital, trabaja Carles Puigdemont con su equipo.
Ambas delegaciones están muy cerca una de la otra, pero no se han vuelto a ver las caras desde que el pasado lunes se tomaran la foto con la urna ilegal del 1-O a sus espaldas. Por el momento la comunicación es a través de emisarios, o eso han dado a entender fuentes de la negociación.
Santos Cerdán no parece preocupado por la situación, no así alguno de su equipo. La situación es cada vez más tensa y el tiempo apremia aunque «el límite es el 27 de noviembre», aseguran esas mismas fuentes.
Lo que se está debatiendo no es si va a haber o no amnistía, eso se da por descontado. Lo que se quiere es encajar todas las piezas, saber quién entra en la baraja y quién no. El intercambio de cromos o, como lo llaman ellos, «el perímetro de la amnistía».
«Esta ley de amnistía sería la primera de la democracia y por eso se tiene que hacer muy bien», explican. Llevan ocho días y todavía no hay visos de que el acuerdo llegue pronto.
Por el momento, las noches de hotel del equipo se han ampliado hasta tres veces seguidas. Es decir, que el equipo socialista contaba con marcharse de Bruselas el pasado fin de semana. Según se desprende de las fuentes, tampoco cuentan con que el acuerdo llegue pronto.
Se desconoce cuáles son las líneas rojas de los socialistas, pero lo que sí está claro es que Puigdemont y su equipo tienen vía libre para pedir lo que consideren. El tiempo corre en contra de los socialistas, apenas quedan 15 días para saber si Pedro Sánchez será investido de nuevo presidente o España está avocada a la repetición de elecciones.