Coalición Canaria critica el pacto migratorio de la UE que, según el PSOE, «está pensado para Canarias»
También Hungría y Eslovaquia se han puesto a este acuerdo que, según alegan, interfiere con la soberanía de los países en cuestiones de gestión migratoria
El Consejo de la Unión Europea, el Parlamento Europeo y la Comisión Europea han logrado cerrar por fin su nuevo acuerdo migratorio, que permitirá ejercer mayor control sobre las fronteras, procesar las solicitudes de asilo de forma más eficaz y liberar la carga de los países sobrepasados por la inmigración con un mecanismo de 'solidaridad'.
Sin embargo, el pacto no ha sido bienvenido por varios de los territorios que más sufren por los flujos migratorios. Tanto Hungría como Eslovaquia se han quejado de las medidas del nuevo acuerdo, mientras que el gobierno de Canarias, zona española saturada por la inmigración, también ha hecho público su descontento.
En una rueda de prensa en Budapest, el jefe de la diplomacia magiar, Péter Szijjártó, junto a su homólogo eslovaco, Juraj Blanár, declaró: «Rechazamos este pacto migratorio lo más decididamente posible. Nadie puede determinar quién puede entrar en Hungría, solo nosotros». Szijjártó agregó: «que la elite de Bruselas se mantenga alejada de este asunto» y enfatizó su rechazo a las medidas de inmigración que el gobierno húngaro no acepta.
El ministro húngaro enfatizó: «Nadie» puede determinar con quién deben vivir los ciudadanos de Hungría, mostrando su oposición a las multas por no aceptar inmigrantes según un principio de redistribución entre los Veintisiete.
Coincidiendo con su colega húngaro, su homólogo eslovaco, Juraj Blanár, expresó: «Nos oponemos fundamentalmente a que la Unión Europea interfiera en los asuntos soberanos de Eslovaquia. Este no es un asunto en el que la UE tenga competencias. No estaremos de acuerdo con ello».
Contradicción en España
Sin embargo, la presidencia española del Consejo de la UE, a través de su cuenta de X (anteriormente Twitter), describió la reforma del sistema de migración y asilo como un «gran avance».
Esta reforma aúndebe ser formalizada y adoptada en la primera mitad de 2024. Juan Fernando López Aguilar, presidente de la Comisión europarlamentaria de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior (LIBE), calificó el acuerdo como «un éxito» y destacó que el principio de «solidaridad y justo reparto de la responsabilidad entre los Estados miembros se traslada a una legislación europea directamente vinculante».
Agregó también que la iniciativa «está pensada específicamente para las islas, como las griegas, Lampedusa y Canarias», tras comparecer con otros diputados del Parlamento Europeo.
Declaraciones rapidamente desinfladas por el propio gobierno canario. Cristina Valido, diputada de Coalición Canaria en el Congreso, se mostró crítica con el pacto. En el pleno del Congreso, Valido dijo: «No nos gusta nada».
Explicó su descontento con que los países que no deseen acoger migrantes puedan resolverlo pagando, evitando así la solidaridad. Valido anunció que preguntará a la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, sobre la modificación de la ley de infancia en lo referente a la acogida de menores migrantes, indicando: «Espero que más pronto que tarde tengamos la modificación de la ley para que el Estado y la UE asuman la responsabilidad que tienen en los menores que llegan solos, no acompañados, a cualquier costa».
Recordó que las leyes de protección a la infancia originales no anticipaban que «miles de niños solos iban a cruzar el océano».