Encuentro con Pedro Sánchez
Feijóo: «Equiparar la Comisión Europea con un mediador salvadoreño es una falta de respeto»
El presidente del Partido Popular ha respondido, tajante, a la comparación entre el interlocutor de Sánchez con el separatismo y la supervisión comunitaria para la renovación del CGPJ
“Yo comprendo que ustedes hagan similitudes de esta naturaleza. Pero a fuerza de ser sincero, si los socios del Gobierno no se fían del Gobierno, comprenderá que la oposición tiene muy difícil fiarse del Gobierno cuyos socios no lo hacen", arrancaba el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo en una de sus primeras respuestas a la prensa, tras la reunión mantenida con Pedro Sánchez, este mismo viernes.
Al presidente del PP le ha parecido de todo punto inadecuado la sola posibilidad de que se compare la supervisión de la Comisión Europea, que ha propuesto en el marco de la negociación para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), con la intervención de un interlocutor externo que tutorice las conversaciones entre el PSOE y sus socios de Junts.
«Entiendo su suspicacia», contestaba Feijóo, «pero yo pido respeto por la Comisión Europea. Pido respeto por la Comisión Europea, primero, porque es una institución española a la que hemos transferido buena parte de nuestra soberanía. Segundo, porque equiparar la Comisión Europea con un mediador salvadoreño especializado en banda armada me parece una falta de respeto que los políticos ni los medios de comunicación españoles podemos caer en ella».
No en vano, tal y como ha explicado el líder de la oposición, la supervisión de la Comisión Europea «se hace con transparencia, es una institución española, europea y a la Comisión Europea le corresponde supervisar que en España se cumple el Estado de Derecho, que hay independencia judicial y que el órgano de gobierno de los jueces es independiente». Es decir, nada en común con la decisión de los socialistas de admitir la presencia de un mediador internacional que esté presente durante las conversaciones que, a futuro, mantendrán Pedro Sánchez y el expresidente catalán y prófugo de la Justicia, Carles Puigdemont.
De hecho, y hasta la fecha, la Comisión de Justicia de la UE ha estado vigilante en relación con la salud del Estado de Derecho en España, en los últimos años y más recientemente, mirando de reojo el proyecto de Ley de Amnistía. De manera que «una vez en su caso aprobado, qué mejor que sea la Comisión la que supervise» las consecuencias de la misma para España, ha aclarado Núñez Feijoo.
«Nosotros nos sometemos a la Comisión Europea. Si el Gobierno se somete a la Comisión Europea, habremos avanzado mucho y habremos dejado un buen legado para gobiernos siguientes. Yo, desde luego, estoy satisfecho de que al final el señor Sánchez haya aceptado la supervisión de la Comisión Europea. Por tanto, yo soy el autor de la propuesta y asumo la responsabilidad de haberla hecho. Y le agradezco al presidente que la haya aceptado», ha zanjado.
No en vano, como resultado de la reunión mantenida con el presidente del Gobierno, el líder de la oposición ha conseguido el compromiso para reformar el artículo número 49 de la Constitución, además de fijar un punto de partida para retomar la renovación del CGPJ que quedó, en suspenso, tras conocerse la reforma legal que llevó a eliminar el delito de sedición y la rebaja de la malversación del Código Penal, a espaldas del PP.
Tras hora y media de reunión en el Parlamento, no en la Moncloa, Núñez Feijóo ha conseguido arrancar a Sánchez un pacto para la reforma de Ley Orgánica llamada a modificar el sistema de elección de los jueces, de modo que sean sus propios compañeros quienes decidan quiénes han de representarles, y en cualquier caso que los nombres resultantes antes de ello cuenten con el beneplácito del observador que designe la Comisión Europea.