Más de 1.000 yihadistas han sido detenidos en España desde los atentados del 11-M

Más de 1.000 yihadistas, 1.048 para ser exactos, han sido detenidos en España en 408 operaciones policiales desde que se cometieron los terroríficos atentados del 11-M de 2004.

Lo mejor de todo es que estas más de 400 operaciones policiales han evitado probablemente decenas de atentados terroristas en territorio español.

«Es muy difícil cuantificar un número exacto», asegura un agente de la Policía Nacional que ha participado en algunas de estas operaciones policiales. Y es que el cambio legislativo que se dio en el año 2015 por el que se permitía una detención mucho más temprana de los yihadistas y el desarrollo tecnológico que ha permitido rastrear con mayor facilidad los actos de autoadiestramiento ha transformado por completo la lucha contra el terrorismo.

De células a individuos solitarios

Si se observan las operaciones policiales que se registraron en el año 2005, por ejemplo, vemos titulares como «desarticulación de una red de reclutamiento», «desarticulación de una red logísticia», «desarticulación de una red vinculada al Grupo Salafista por la Predicación y el Combate argelino».

Si repasamos las operaciones policiales que se han dado en este mismo 2024, por contraste, encontramos titulares como «detenido un hombre en Melilla», «una operación en Barcelona finaliza con la detención de un hombre», «agentes de la Guardia Civil detienen en Barcelona a un individuo».

El contraste es evidente. Hasta el cambio legislativo de 2015 se detenían células terroristas compuestas por varias personas que bien enviaban a terroristas a países en conflicto como Siria o Libia o, incluso, se encontraban en fases avanzadas de perpetrar atentados en suelo español.

A partir de entonces, la mayoría de las detenciones son individualizadas y los yihadistas se encuentran en fases más incipientes de preparación de posibles atentados terroristas.

No obstante, el agente de Policía también advierte de que «aunque ha cambiado la lucha antiterrorista, también han variado los actos terroristas». Probablemente los atentados de Barcelona y Cambrils de 2017 hayan sido los últimos provocados por células terroristas. «En la actualidad, el terrorismo en Europa se desarrolla principalmente a través de los llamados 'lobos solitarios' y estos son mucho más imprevisibles», afirma.

Así sucedió en el último ataque yihadista que ha vivido España. Fue el 25 de enero del pasado 2023 cuando un marroquí, del que se está estudiando si tiene, además, algún tipo de desequilibrio mental, atacó distintas iglesias católicas de Algeciras asesinando al sacristán de la parroquia de La Palma.

Ahora, la mayoría de los atentados son perpetrados por terroristas que actúan por cuenta propia tras haberse adentrado en un proceso de radicalización», afirmaba hace unos meses el director del Observatorio Internacional de Estudios sobre Terrorismo, Carlos Igualada, a El Debate. También afirmaba que «estas acciones cuentan con un presupuesto muy limitado, por lo que acuden a recursos que están al alcance de su mano». De ahí que el 75 % de los ataques registrados en Europa entre 2018 y 2021 se han producido mediante apuñalamiento.

Son yihadistas muy jóvenes, la franja de edad mayoritaria es de entre 18 y 24 años, aunque cada vez hay más menores de edad. Por lo tanto, se impone una mayoría de solteros y casi dos tercios del total en situación de desempleo. Casi la mitad tienen antecedentes por delitos comunes. De hecho, un tercio de los detenidos por yihadismo en 2022 se encontraban ya en la cárcel cuando solo el 21 % tenían antecedentes por terrorismo.