Sánchez trata de tapar su caso de corrupción pidiendo la dimisión de Ayuso y acusando a Feijóo de amistad con un narco
Abascal ha preguntado al presidente del Gobierno por la trama del PSOE y Sánchez ha rehusado contestar y ha afirmado que Vox ha «desviado 7 millones» a la fundación DENAES
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, han vuelto a enfrentarse este miércoles en el pleno del Congreso en un momento de máxima tensión entre el Ejecutivo y la oposición por la Ley de Amnistía, y –sobre todo– por el caso de corrupción del PSOE.
En su primer turno, el líder de la oposición ha indicado a Sánchez que «está claro que su futuro está amenazado por la corrupción» ya que «su Gobierno pagó por mascarillas que la trama convirtió en mordidas». Sin embargo, el presidente del Ejecutivo se ha salido por la tangente y ha pedido la dimisión de Isabel Díaz Ayuso por la denuncia de la Fiscalía que contra su pareja por un supuesto delito fiscal. «Le exijo la dimisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid», ha reiterado hasta en tres ocasiones.
Feijóo, en su turno de réplica, ha reprochado al jefe del Gobierno la trama de corrupción del PSOE, enunciando «fiestas sórdidas, fotografías que no se pueden enseñar, armas, tráfico de maletas, decenas de móviles y chivatazos». Por ello, Feijóo le ha preguntado «¿no debería ser usted más prudente», antes de que la presidenta del Congreso, Francina Armengol, le cortara de nuevo el micrófono al líder de los 'populares'.
Sánchez ha rehuido de nuevo la causa socialista y ha pasado a la ofensiva personal: «Vamos a imaginar que soy alto cargo de una comunidad autónoma, y durante 5 años desarrollo una amistad con un capo del narcotráfico en Galicia». «Usted desarrolló la amistad con un capo, y con esa amistad usted ha podido llegar a lo más alto de su partido político, y en mi partido político no podría haber llegado ni a concejal de pueblo», ha zanjado.
Por su parte Santiago Abascal ha cuestionado al presidente del Ejecutivo por qué no se inhibió del rescate de AirEuropa, compañía con la que, presuntamente, tiene relaciones económicas la cónyuge del presidente, Begoña Gómez. Sin embargo, en la respuesta, Pedro Sánchez, con tono irónico, ha acusado al presidente de Vox por financiación ilegal respecto a la fundación DENAES; «a la cual han desviado 7 millones de euros de su partido político». «Antes de hablar de ejemplaridad y de corrupción, tápese un poco», le ha espetado a Abascal.
La estrategia socialista la ha continuado la vicepresidenta del Gobierno, María Jesús Montero, que le ha dicho a la número 2 del PP, Cuca Gamarra, que «de forma periódica surgen casos de corrupción porque ustedes no han hecho ningún tipo de limpieza». «Feijóo se sigue sentando cada mañana en una sede, la de Génova, pagada con dinero negro. No tienen ninguna autoridad para hablar de corrupción. Si quieren responsabilidad política exijan la dimisión de la señora Ayuso», ha replicado sin contestar acerca de la trama del PSOE.
El vicesecretario Económico del PP, Juan Bravo, ha asegurado que Montero «nos tiene qué decir» cuál es su papel en las adjudicaciones de mascarillas como máxima responsable de Hacienda. La miembro del Gobierno ha arremetido contra Bravo por su etapa como consejero en la Junta de Andalucía. «¿Asumió responsabilidades políticas?» ha cuestionado para después argumentar que los contratos de la trama socialista «son legales».
A continuación, el PSOE –partido del Gobierno– ha optado por controlar al Ejecutivo, y en concreto lo ha hecho el diputado Gómez de Félix; miembro de la cúpula de Ferraz. Así, el parlamentario del Grupo Socialista ha pedido a Montero que explique la posición del Gobierno sobre la privatización de la sevillana Plaza de España. Los dos políticos han coincidido en su análisis, para que Gómez de Félix haya zanjado que «el PP, son ustedes capaces de quedarse tuertos con tal de ver al de en frente ciegos».
El portavoz parlamentario del PP, Miguel Tellado, ha apelado a la vicepresidenta y líder de Sumar, Yolanda Díaz. Así, ha recalcado que Armengol no puede seguir como presidenta del Congreso, y le ha pedido a Díaz que «se aparte» y no «mantenga el silencio cómplice». La dirigente 'magenta' también ha mantenido la línea marcada por Sánchez: «Estoy segura que a la vista de los hechos que conocimos ayer de la señora Ayuso, ustedes habrían cambiado hoy la pregunta». Tras ello, Díaz ha apuntado que «los indultos por corrupción en España se tienen que acabar», provocando la risa de la bancada 'popular' por la medida de gracia a los políticos presos del procés.
El portavoz nacional del PP, Borja Sémper, ha solicitado a la ministra de Defensa, Margarita Robles, que dé su opinión acerca de la trama de corrupción del PSOE. Sin embargo, la miembro del Gobierno ha replicado que el PP «nunca» le pregunta sobre los asuntos que afectan a su ministerio, sin mencionar el caso que afecta a los socialistas.
La dirigente de Vox, Pepa Millán, ha interpelado al titular de Interior, Fernando Grande Marlaska: «Por qué contrató con la empresa de Koldo». «Es usted el peor ministro del Interior que jamás hemos tenido», ha aseverado. Marlaska, por contra, ha pedido a Vox que «dejen de socavar nuestra democracia», para después añadir que «bueno, ustedes no creen en la democracia».
Elías Bendodo, vicesecretario 'popular' ha pedido al ministro Ángel Víctor Torres –el expresidente de Canarias que contrató con la trama del PSOE– que dimita. «Mis responsabilidades fueron intentar salvar vidas. Y lo que me apena es no haber salvado más», ha señalado el titular de Política Territorial sobre los contratos de la administración que lideraba.
La ministra Isabel Rodríguez también ha cargado, aunque de soslayo, contra Ayuso por la denuncia del Ministerio Público contra su pareja. De esta manera, ha asegurado que «a lo que no me puedo comprometer, señorías, a que todo español pueda acceder a un piso en Chamberí de un millón de euros». «Tampoco tengo ningún problema a que se pueda acceder a un piso de un millón de euros en Chamberí, siempre y cuando se haya ganado honestamente y se haya tributado por ello».
A renglón seguido, el diputado 'popular' Miguel Ángel Sastre ha subrayado que el Gobierno «lo que toca lo empeora». «La vivienda es otra cortina de humo más para que su presidente tape los escándalos, y para que pueda seguir durmiendo un día más en la Moncloa», ha agregado.
Así las cosas, en la sesión de control de este miércoles ha quedado claro que la estrategia de defensa de Sánchez y su gabinete sobre la trama de corrupción del PSOE consiste en atacar a la oposición por otros aspectos. El principal foco de los embistes socialistas ha sido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ya que –aunque a título personal ella no ha sido señalada por ninguna irregularidad– su pareja ha sido denunciada por la Fiscalía un presunto fraude fiscal en un momento muy conveniente para el Ejecutivo.