Ribera mira ya hacia Bruselas y abre la puerta a ser comisaria de la próxima Comisión Europea
«Si acabo siendo yo la persona que tiene la suerte de poder desarrollar esas cosas, lo haré encantada de la vida», ha afirmado
La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, comienza a mirar hacia Bruselas y ha señalado este viernes que se ve como «un activo importante» del Gobierno y del PSOE de cara a las elecciones europeas del próximo 9 de junio, y ha abierto la puerta a ser comisaria en el próximo Ejecutivo europeo.
«En esa campaña me veo como un activo importante de mi gobierno y de mi partido», ha asegurado en declaraciones a periodistas antes de participar en el Foro de Cohesión celebrado en Bruselas, aunque ha dicho que las decisiones sobre el cabeza de lista para las europeas o el representante de España en la próxima Comisión Europea son decisiones que «le trascienden» y «que serán comunicadas a su debido tiempo por las instancias adecuadas».
Ribera, que aparece en las quinielas del PSOE para los comicios europeos, ha abierto la puerta a ser la próxima responsable comunitaria de Energía. «Si acabo siendo yo la persona que tiene la suerte de poder desarrollar esas cosas, lo haré encantada de la vida. Y si es otra persona, ayudaré a la persona que esté», ha afirmado, reiterando en todo caso que disfruta enormemente con el desarrollo de la agenda nacional ya que «trabajar en España es trabajar en Europa». «En un sitio o en otro estaré muy contenta», ha resumido.
Sobre el futuro de la política climática europea, la vicepresidenta ha señalado que es necesario «consolidar» la agenda verde iniciada durante el mandato de Ursula von der Leyen, con quien «se ha avanzado mucho en la dirección correcta» pero se tratan temas que «no se resuelve en cuatro años, en cinco años, ni en diez años».
En un contexto electoral en el que la Seguridad y Defensa gana peso en el escenario europeo, Ribera ha afirmado que los comicios deben dirimir «qué proyecto común» construir para recalcar que el debate no debe versar solo sobre «cómo se defiende Europa o cómo Europa muestra sus miedos», «sino qué Europa queremos construir para que esos miedos nunca se tengan por qué materializarse».