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El catedrático de Derecho Administrativo Tomás Ramón Fernández, en el Senado

Cámara Alta

Un catedrático de Derecho critica en el Senado que Sánchez apruebe la amnistía por «interés individual»

El jurisconsulto Tomás Ramón Fernández también ha expresado que «un Tribunal Constitucional que se respete a sí mismo no podría decir que esta ley es una ley que no infrinja la Constitución»

El catedrático de Derecho Administrativo Tomás Ramón Fernández ha enmarcado la proposición de ley de amnistía que se está tramitando actualmente en el Senado en un «interés individual», a la vez que ha dicho que «no tiene vuelta de hoja» desde el punto de vista jurídico y ha criticado que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, accediera a aprobar esta medida después de las elecciones generales del 23 de julio.

Así se ha pronunciado este jurista propuesto por el PP durante su comparecencia en la comisión del Senado que está tramitando la amnistía, donde ha expuesto sus motivos que, bajo su punto de vista, determinan que esta medida no es constitucional.

En este contexto, el jurisconsulto Tomás Ramón Fernández hace alusión a los argumentos del texto de la Ley de Amnistía para sacar adelante esta norma: «Hace un esfuerzo de aportar argumentos en pro de la constitucionalidad y la verdad es que no aporta ninguno consistente».

De esta manera, cree que «no se discute» si la amnistía es útil o inútil, sino lo que se debate en esta comparecencia del Senado es si tiene cabida o no en la Constitución y lo demás es «forraje que no hace más que despistar». «La respuesta es que no está prevista en la Constitución, alguno dirá que se les olvidó a los constituyentes, no se les olvidó, lo tuvieron presente y no quisieron llevarlo a la Constitución», ha agregado.

Aunque ha descartado meterse en el fondo del asunto de la amnistía, el jurista propuesto por el PP ha calificado como «argumentación buenista» la idea del Gobierno de conseguir una pacificación del tema catalán.

«Yo diría que si eso se hubiera dicho antes del 23 de julio, tendría alguna credibilidad el argumento, pero como se dijo después, a la vista de los números proporcionados por las elecciones del 23 de julio, no tiene esa credibilidad, más bien, lo que se desprende de eso, sin necesidad de ser persona malintencionada, es que echando las cuentas, faltan unos votos y de alguna manera se han querido conseguir», ha proclamado.

En este contexto, cree que la amnistía no nace desde una «justificación racional», sino es la expresión de «un interés individual y concreto de quién se beneficia, de uno de los que se beneficia, de quién pone en marcha la ley en cuestión».

«Ese no es un interés eximible. Un Tribunal Constitucional que se respete a sí mismo no podría decir que esta ley es una ley que no infrinja la Constitución porque carece de una justificación objetiva», ha defendido.