Entrevista | Diputado de Vox
Figaredo (Vox): «Hay una disidencia contra el pensamiento único. Es lo que hace atractivo el Viva»
El secretario general del grupo parlamentario de Vox anima a participar en el festival anual que organiza el partido y que contará con líderes internacionales como Milei este fin de semana en el Palacio de Vistalegre en Madrid
José María Figaredo (Gijón, 1988) es diputado de Vox por Asturias y secretario general del grupo parlamentario en esta legislatura. Recibe a El Debate en el Congreso unos días después de la cita electoral en Cataluña, donde el partido ha mantenido sus 11 escaños, y también unos días antes que la formación celebre su festival anual, el Viva 24, este año en clave europea ante los comicios del 9 de junio, que Vox ve como una oportunidad histórica para un cambio de rumbo de las políticas.
–¿Qué lectura hace a nivel general de los resultados electorales del pasado domingo?
–El primer resultado que vemos es que Vox se consolida como fuerza política en Cataluña en una situación muy complicada. Hemos logrado mantener la posición y subir en votos y en porcentaje. Para Vox estas elecciones han sido un hito muy relevante. Para España el resultado no es bueno porque, aunque hay quienes están celebrando la caída de Esquerra y demás, lo cierto es que el PSC se comporta como un partido separatista más y ha obtenido un éxito tremendo. Y la situación va a ser muy compleja, puesto que el separatismo va a tener muchísima más fuerza ahora.
–¿Qué escenario ve más probable: una repetición electoral, un Gobierno de Salvador Illa o un Gobierno de Carles Puigdemont?
–Eso sería hacer un poco de comentarista y tampoco es nuestra función, pero lo que sí que sabemos es que Sánchez solo se sirve a sí mismo y el socialismo va a tratar de protegerse a sí mismo. No van a pensar en los intereses de España, ni en los intereses de Cataluña. Van a pensar en los intereses de Sánchez y del Partido Socialista. Por lo tanto, podemos esperar cualquier cosa, pero desde luego nada bueno para los españoles.
–Hablaba de la consolidación de Vox. En Cataluña hemos visto un fuerte crecimiento del PP, pero a la vista de los resultados, no fue a costa de los votos de Vox. Desde su partido han señalado estos días que entre ambos no hay vasos comunicantes...
–Bueno, realmente el objetivo del PP desde hace años es simplemente terminar con Vox. Se creen que el voto de Vox debería estar directamente integrado en el PP y eso no es cierto y lo hemos visto. Somos partidos diferentes, con ideas diferentes y defendemos principios diferentes. El ejemplo más claro es nuestra oposición frontal a la Agenda 2030, al Pacto Verde Europeo, cuestiones de inmigración masiva ilegal,...tenemos principios diferentes y, por lo tanto, un electorado diferente.
–Este fin de semana, Vox celebra la tercera edición de su festival Viva, el Viva 24, que este año se desarrolla en clave europea. Para quienes no lo conocen, ¿en qué consiste?
–Se celebra durante todo un fin de semana. Habrá actos viernes, sábado y domingo y no solo con los líderes nacionales de Vox, sino también con líderes del ECR, el Grupo de los Reformistas y Conservadores Europeos, y algunos líderes internacionales de partidos amigos de Vox. La idea es que todo el mundo pueda venir y acercarse a las ideas que representan el cambio en Europa y en España, que son innovadoras, disidentes con el statu quo, y poder tener este contacto desde el viernes con actos centrados especialmente en jóvenes, el sábado, cuando habrá casetas temáticas por las regiones de España y podremos entrar en contacto con la historia y las tradiciones de España, y el domingo, con conferencias tanto de los líderes nacionales de Vox como de líderes internacionales.
Vox defiende unas ideas que muchos partidos en todo el mundo están empezando a defender y que son auténtica disidencia contra la opinión publicada
–¿Qué supone para Vox tener aliados internacionales como Milei o Giorgia Meloni, la imagen junto a ellos? En ediciones anteriores hemos visto también a Mateusz Morawiecki, a Donald Trump...Muchos están gobernando, han gobernado o tienen fuerza en sus países...
–La clave de esta cuestión no es tanto una imagen, sino la realidad que hay de fondo, que es que Vox defiende unas ideas que muchos partidos en todo el mundo están empezando a defender. Unas ideas que son auténtica disidencia contra la opinión publicada, contra esa idea que nos tratan de colocar, contra esa manipulación global que intentan colocarnos, de repente surgen pequeños focos de resistencia que van consolidando ya en partidos firmes.
En Estados Unidos, en Argentina, en Italia, en España, en Portugal...vemos cómo esa disidencia ideológica empieza a tomar fuerza. Y eso es lo realmente interesante, cómo parecía que en todo el mundo solo podías pensar en una única dirección, el pensamiento único se estaba imponiendo en todos los estratos sociales, y de repente no, de repente hay una disidencia ideológica. Hay alguien que dice que merece la pena salvar las tradiciones nacionales, luchar por los trabajadores de España, trabajar por el campo, defender nuestra industria...Cuestiones que hasta ahora parecía que estaban olvidadas y que todos estábamos en el no consumir, en dejar de producir, en importarlo todo. Pues no, de repente alguien disiente y está dispuesto a plantar la batalla. Y eso es precisamente lo que hace atractivo esta convención que celebramos el fin de semana.
–Javier Milei se ha convertido en un fenómeno no solo en América, sino en todo Occidente. Después de la polémica que hubo por las acusaciones de Óscar Puente, no va a reunirse con Pedro Sánchez en su visita a España. ¿Qué implica esto?
–Bueno, la política exterior de Pedro Sánchez es nefasta para España. Pero no solo es la cuestión de Argentina. Porque ahí lo que ha hecho ha sido enviar a un ministro de España a insultar. Y digo enviar porque nadie se cree que un ministro hable por sí y ante sí; eso está acordado, se sabe lo que se va a decir.
Pero la misma situación se produce en tantas otras esferas de la vida internacional. España está diplomáticamente a los pies de Marruecos; no defiende sus intereses nacionales, no se sabe por qué; está en una cruzada anti israelí, defendiendo el antisemitismo, amparando a un grupo terrorista como es Hamás, de nuevo, dejando a España en evidencia ante la comunidad internacional y, sobre todo, ante los actores relevantes internacionales...En definitiva, la política exterior de Pedro Sánchez es absolutamente incomprensible y, como tantos otros aspectos de su política, va en detrimento de los intereses de los españoles.
–En unas semanas se celebran las elecciones europeas, que Vox describe como una cita histórica ante la posibilidad de que por primera vez haya una mayoría alternativa al socialismo. ¿Con qué expectativas las afrontan?
–Las expectativas son realmente buenas. Parece que podría suceder ese cambio de mayorías. En la política europea desde hace años gobierna una mayoría muy consolidada, que es el Partido Socialista, el Partido Popular y los Verdes, y los tres unidos llevan controlando la política europea desde hace décadas. Ahora parece que podría haber una mayoría alternativa en la que el grupo de reformistas y conservadores podrían obtener capacidad para dirigir o al menos marcar la política europea.
¿Cómo puede ser que hoy los agricultores europeos estén en peligro de extinción, o que Europa no tenga la soberanía energética?
Esto es motivo de esperanza y de alegría porque no solo en España surgen partidos disidentes como Vox; en toda Europa están surgiendo y están cobrando muchísima fuerza porque ven que hay problemas reales de los europeos que no han sido abordados. Desde la cuestión de la agricultura, que ha sido abandonada y existe una voluntad de luchar por ella en muchos partidos políticos. La cuestión migratoria: Europa se ha visto enfrentada a unas avalanchas migratorias ilegales masivas que no pretenden integrarse y que los partidos que hasta ahora gobernaban no han sido capaces de enfrentar este problema. La cuestión energética: Europa está a los pies de Rusia, una dependencia del gas terrible; se han negado durante años a hacer florecer la energía nuclear, ahora parece que están cambiando de signo, no así en España...En definitiva, hay muchísimas cuestiones que España y Europa necesitan, y tenemos que disentir en todas ellas para alzar estas banderas que durante tanto tiempo han sido abandonadas.
–Desde el principio se ha acusado a su partido de ser antieuropeísta. ¿Qué Europa imagina Vox?
–Una Europa de naciones soberanas y libres. Europa nace como un acuerdo entre iguales, en el que todos estamos de acuerdo en unirnos, en colaborar en determinados aspectos para mejorar la vida de todos los europeos. A día de hoy lo que vemos es que la Comisión Europea está imponiendo normas que en realidad van en detrimento de los intereses de los europeos.
¿Cómo puede ser que a día de hoy los agricultores europeos estén en peligro de extinción? ¿Cómo puede ser que Europa no tenga la soberanía energética, que realmente es uno de los gérmenes de Europa? Piensen que uno de los tratados fundacionales es el Euratom, el Tratado de la Energía Atómica en Europa, el Tratado del Carbón. La energía era un elemento esencial. Y hoy Europa está a los pies de intereses extranjeros. Durante muchísimo tiempo ha legislado en contra de los intereses de los europeos y lo que tenemos que hacer es poner los intereses de los españoles y de los europeos en el foco de la política.