El Gobierno se enreda con la «financiación singular» de Cataluña y es incapaz de explicarla

La «financiación singular» que Pedro Sánchez está dispuesto a pactar con ERC a cambio de la investidura de Salvador Illa ha sumido a los socialistas en un mar de contradicciones, ambigüedades e inconcreciones. Ni en Ferraz ni en la Moncloa terminan de dar con la tecla para justificar cómo encaja ese trato privilegiado y preferente a Cataluña con un «sistema multilateral» en el que entren el resto de las comunidades autónomas. Ni tampoco en qué consistiría.

La explicación se le atragantó este martes a la portavoz del Ejecutivo, Pilar Alegría, en la comparecencia posterior al Consejo de Ministros. En ella apareció junto a Diana Morant, líder del PSPV, que lo tiene aún más complicado en su doble condición de ministra y secretaria general de los socialistas en una comunidad que reclama 1.300 millones más al año al Estado por la infrafinanciación que padece. De momento, Morant ha optado por callar mientras en Castilla-La Mancha, Extremadura y Andalucía los socialistas exigen que no se discrimine a sus comunidades.

Así las cosas, con este mar de fondo, las preguntas de la rueda de prensa se centraron en esa «financiación singular». Alegría repitió hasta en tres ocasiones que, en los seis años de Pedro Sánchez como presidente, las comunidades han recibido 250.000 millones de euros más que con Mariano Rajoy, a los que sumó otros 61.000 millones del plan de recuperación.

No obstante, no fue capaz de explicar en qué se diferenciaría el modelo para Cataluña del que tienen el País Vasco y Navarra. La portavoz del Gobierno se limitó a zanjar: «Este Gobierno nunca ha hablado de concierto». Y cuando se vio más cercada atacó a las comunidades gobernadas por el PP, por mantener una «actitud irresponsable», como la definió.

Alegría situó como cabecilla a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a la que recordó que su región ha recibido del Gobierno de Sánchez 108.000 millones de euros en seis años, 36.000 más que con Rajoy, según ella. Y todo para después suprimir los impuestos a los ricos y dejar de recaudar 1.400 millones de euros, la acusó. Dinero con el que, según Alegría, podrían construirse 700 escuelas infantiles, 250 colegios o 20 hospitales.

«De lo que estamos hablando es de trasladar un mejor modelo para todas las comunidades autónomas, que atienda sus singularidades, que nos permita atender las necesidades de los territorios, permitir el acceso en condiciones de igualdad a los servicios públicos y atender a las competencias que tienen asumidas los distintos territorios. Y todo ello, siempre básico y fundamental, en el marco de la Constitución y dentro del Estatuto de Autonomía», afirmó de corrido, leyendo un argumentario.

La portavoz de Sánchez instó al PP a que explique su modelo, porque el Gobierno no lo conoce, afirmó. Y añadió que mal camino toman los de Alberto Núñez Feijóo si su única propuesta es «agitar el agravio territorial».

A la misma hora, desde la sede del PP, el portavoz del partido le respondía que lo que debe hacer el Gobierno es convocar urgentemente el Consejo de Política Fiscal y Financiera para escuchar a las comunidades. «La financiación no se pacta en una mesa camilla entre dos y en Ginebra. Tiene que ser un pacto en el que todos ganen mucho y todos cedan un poco», sostuvo Borja Sémper.