Esta es la trampa que ha colado el PSOE en la ley de paridad para quitar poder al PP en el Senado

El Boletín Oficial de las Cortes Generales publica este martes el texto definitivo del proyecto de la Ley Orgánica de representación paritaria y presencia equilibrada de mujeres y hombres que fue votado y aprobado el jueves pasado de la Comisión de Igualdad del Congreso. Y que este jueves validará el Pleno de la Cámara Baja, antes de ser remitido al Senado.

Como contó El Debate el viernes, el texto incluye una polémica disposición final nueva que el PSOE pactó con sus socios en el trámite de enmiendas parciales, aun en contra del criterio de la letrada de la Comisión.

Esa disposición cambia por la puerta de atrás la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera para despojar al Senado de la capacidad de veto que actualmente tiene sobre los objetivos de déficit y deuda que anualmente le presenta el Gobierno. Es decir, para neutralizar al PP, que actualmente tiene mayoría absoluta en la Cámara Alta.

En concreto, la triquiñuela reforma el artículo 6 de esa ley para que, si el Senado veta la senda de deuda y déficit, el Congreso pueda levantar el veto con mayoría simple y seguir como si nada. «Si aprobados los objetivos de estabilidad presupuestaria y de deuda pública por el Congreso, los mismos fuesen rechazados por el Senado, dichos objetivos se someterán a nueva votación en el Pleno del Congreso, aprobándose si este los ratifica por mayoría simple. Si son rechazados, el Gobierno, en el plazo máximo de un mes, remitirá un nuevo acuerdo que se someterá al mismo procedimiento», establece el texto nuevo.

La letrada adscrita a la Comisión de Igualdad advirtió de ello durante la tramitación, antes de que fuera demasiado tarde. «Es evidente la falta de conexión material entre la enmienda y la iniciativa que se tramita», dejó escrito en un informe en el que también alertó de que la doctrina del Tribunal Constitucional es contraria a este tipo de prácticas, porque pueden vulnerar los derechos de los diputados.

Sin embargo, los socialistas hicieron caso omiso. Según estos, que el Senado pueda tumbar los objetivos de deuda y déficit desde una reforma legal del año 2012 es una «anomalía» que hay que cambiar de una vez por todas. Aunque el método elegido sea contrario a la doctrina del Tribunal Constitucional.