El hermano de Sánchez tiene también un DNI portugués al margen del español que ha entregado a la juez

El músico David Sánchez, hermano del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuenta con un DNI portugués al margen del documento español que ha entregado a la magistrada Beatriz Biedma, titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Badajoz. En el carnet español figura un domicilio en el casco histórico de Badajoz en el que hace tres años que no reside. La defensa del hermano de Sánchez ha recurrido la decisión de la juez de pedirle a la Guardia Civil que investigue si tiene vínculos con la trama de Koldo que investiga la Audiencia Nacional.

Tal y como ha podido saber El Debate, el hermano de Sánchez se sacó la identidad portuguesa justo antes de comprarse mediante dos cheques bancarios el palacete de Elvas. La adquisición de la propiedad se llevó a cabo el 23 de febrero de 2023 y el DNI luso se lo sacó varias semanas antes. El hermano de Sánchez obtuvo el documento en el Serviço de Finanças de Elvas, la oficina de impuestos de la localidad donde reside. En la ficha que rellenó para solicitar el carnet figura como residencia el hotel Casa d´Olivença, donde vivió durante dos años.

Fue precisamente el dueño del hotel quien confesó a El Debate que el hermano de Sánchez le pidió permiso para poder usar la dirección como domicilio provisional. El músico, que vivió en una habitación de la segunda planta entre abril de 2021 y mayo de 2023, usó ese enclave para poder solicitar el DNI luso y, al mismo tiempo, para poder abrir una cuenta bancaria en el país vecino. La habitación que utilizó, que en realidad era un pequeño apartamento, tiene un coste mensual de 3.600 euros al mes, una renta superior al salario que él cobra como alto cargo de la Diputación de Badajoz. Su remuneración es, aproximadamente, de 39.200 euros netos al año y sólo la estancia de doce meses en el hotel cuesta 43.200 euros.

Desde que tiene los dos DNI, el hermano de Sánchez los usa al mismo tiempo. Cuando está en España con el DNI español y cuando cruza la frontera con el segundo documento. Una de las últimas gestiones que ha llevado a cabo con la identidad portuguesa ha sido la contratación de un abogado, con el que ha intervenido recientemente en una disputa que el músico mantiene con una residencia de ancianos que colinda con su propiedad. La residencia, de titularidad concertada, se encuentra inmersa en unas obras de remodelación completa. Poco tiempo después de comenzar, el hermano de Sánchez se presentó en el portal del inmueble para quejarse de los ruidos que estaban haciendo.

«Nos pidió mover un aire acondicionado porque decía que el motor hacía mucho ruido y lo hicimos», explica un testigo de aquella escena. Posteriormente volvió a quejarse de un olor a pescado frito. Una de las chimeneas de la residencia da a la parte trasera de su vivienda y, según el relato del hermano de Sánchez, el olor llegaba a su terraza. Fue en este segundo episodio cuando acudió junto a un abogado de Elvas para tratar de resolver el conflicto.

Uno de los último movimientos del hermano de Sánchez ha sido recurrir a través de su abogado la decisión de la juez de pedirle a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que investigue si tiene algún vínculo con el empresario Víctor de Aldama, cabecilla de la trama de Koldo que investiga la Audiencia Nacional. Aldama, contacto a su vez del exminsitro José Luis Ábalos y Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tejió un entramado societario a pocos metros de la residencia del músico justo antes de que los investigadores comenzaran a practicar detenciones.

Las sociedades de la red que fueron constituido en Elvas son Atmósferaudaz Unipessoal LDA, Bravapercepção Unipessoal LDA, Etapinvisível Unipessoal LDA y Fenómenesférico Unipessoal LDA. Detrás de ellas, además de Aldama, se encuentran Ignacio Díaz Tapia, vinculado con un testaferro del presidente venezolano Nicolás Maduro que está en la diana del FBI; Javier Serrano Costumero y César Moreno García.

El hermano del jefe del Ejecutivo también se ha negado a que la Agencia Tributaria haga un rastreo de su patrimonio. Sus bienes, que pasaron de 261.000 euros a 1,7 millones tras mudar su residencia a Tailandia, están siendo analizados por técnicos de Hacienda después de que la magistrada haya pedido sus últimas cinco declaraciones de la renta. En esos bienes se encuentran propiedades inmobiliarias, dinero en cuentas bancarias y un paquete de acciones del BBVA.