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El hombre portando un cuchillo frente a la Guardia Civil@Indicativo_Zeta

Colectivos de guardias civiles alertan de la indefensión vivida en Badajoz: «Contra el delincuente, mano dura»

Jucil Vizcaya ha calificado como «tremendo» que los agentes continúen con «un protocolo de hace 41 años»

Sobre las 16 horas de este sábado un hombre armado con un cuchillo de grandes dimensiones se atrincheró en su residencia familiar en Fregenal de la Sierra (Badajoz), con la intención de matar a sus padres, que se encontraban en el interior del domicilio.

Tal y como refleja un vídeo del suceso, varios agentes de la Guardia Civil del municipio se trasladaron a la casa del atrincherado, a quien intentaron disuadir de forma pacífica. El hombre, cuchillo en mano, comenzó a encararse a la Benemérita, que se alejó lentamente ante las amenazas del atrincherado.

«Tú para allá, tu para allá, idos de mi puta calle», «cabr*** de mierda, a mí no me lleváis detenido», gritaba el hombre –visiblemente alterado– a los agentes, mientras les señalaba con el enorme cuchillo que portaba. Este suceso ha reabierto el debate sobre la indefensión de la Guardia Civil en este tipo de situaciones. Una debilidad que pone en peligro la integridad física de los agentes.

Son varias las asociaciones de la Guardia Civil que se han mostrado indignadas ante la desprotección de los agentes. Jucil Vizcaya ha denunciado a través de un mensaje en X (antes Twitter) que su plataforma solicitó «un nuevo protocolo del uso del arma de fuego», que fue denegado por el Gobierno. Asimismo, ha calificado como «tremendo» que los guardias civiles continúen con «un protocolo de hace 41 años».

Aunque los agentes llevaban consigo armas de fuego, la inseguridad jurídica y la falta de amparo que sufre la Guardia Civil provoca que muchos efectivos prefieran no disparar, poniendo en riesgo su vida, por evitar conflictos posteriores con la Justicia.

«Contra el delincuente, mano dura policial y judicial», ha exigido Jucil Vizcaya, tras señalar y defender la necesidad de «más apoyo institucional y más protección jurídica».

Por otro lado, Jucil Nacional ha denunciado que la Guardia Civil «no cuenta con unidades de apoyo cercanas y no disponen de pistolas taser para poder paralizar al sujeto». Este tipo de arma eléctrica tiene la capacidad de inmovilizar a una persona mediante descargas eléctricas, sin necesidad de producir daños mayores y facilitando la labor de los agentes de la Benemérita.

Al respecto, Jucil Nacional ha señalado directamente al Ejecutivo de Pedro Sánchez, al que culpan de la indefensión que sufren los guardias civiles: «Para este Gobierno no somos una profesión de riesgo», denuncian. Cabe destacar que esta histórica reivindicación de la Guardia Civil solo pretende que se equiparen sus condiciones de seguridad con las de los agentes de las policías autonómicas, como los Mossos, la Ertzaintza o la Foral Navarra.

La Guardia Civil permaneció durante más de cuatro horas en el lugar de los hechos hasta que finalmente los agentes consiguieron disuadir al hombre atrincherado, quien fue detenido. Según informan medios locales, todo apunta a que el altercado se produjo por una cuestión sentimental del protagonista del suceso.