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La ministra de Igualdad, Ana Redondo, este jueves en el CongresoEFE

Nadie lo vio

El Gobierno ahora sí se fía de los empresarios y les pide ayuda para arreglar el error en la ley de paridad

Ana Redondo anuncia que el PSOE registrará una enmienda la semana que viene en el Congreso, pero no aclara si será a la propia ley o si el Ejecutivo utilizará otra ley en tramitación

La ministra de Igualdad compareció este jueves en el Congreso para tratar de justificar el «error técnico» en la redacción de la ley de paridad que ha dejado desprotegidos a los trabajadores que se acogían al permiso de cuidado de familiares o que solicitaban el cambio de jornada por conciliación.

Ana Redondo anunció que el fallo se subsanará tramitando una enmienda la próxima semana. Pero no especificó si será una enmienda a la propia Ley orgánica de representación paritaria y presencia equilibrada de mujeres y hombres (su nombre oficial en el BOE); o si colarán una enmienda intrusa en un proyecto o proposición de ley orgánica que esté a punto de ser aprobada por las Cortes, aunque no tenga nada que ver.

El portavoz del PP en la Comisión de Igualdad, Jaime de los Santos, pidió a la ministra que aclare «dónde, en qué ley», pero en vano. El diputado popular recordó a Redondo que la propia ley de paridad ya fue usada para reformar, por la puerta de atrás, la Ley orgánica de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera. Con el objetivo de despojar al Senado de su capacidad de veto sobre los objetivos de déficit y deuda públicos, el patrón que sirve anualmente para elaborar los Presupuestos Generales. Porque el PP tiene mayoría absoluta en la Cámara Alta.

Además, hay un inconveniente añadido: una ley orgánica, como lo es ésta, solo puede reformarse con otra ley orgánica. No sirve una ley ordinaria. Por mucho que quieran correr los socialistas, es complicado que el trámite parlamentario baje de los dos meses.

En cualquier caso, la titular de Igualdad aclaró que en este ínterin «las personas trabajadoras no están desprotegidas». Y apeló a la «aplicación coherente del derecho», como en su día hizo su antecesora, Irene Montero, cuando decenas de violadores empezaron a beneficiarse de un agujero en la ley del ‘solo sí es sí’. «Confiamos en la Justicia a la hora de valorar y aplicar la ley y estamos convencidas de que no se producirá desprotección ni despidos masivos», sostuvo.

Redondo también apeló a los empresarios, tantas veces criminalizados por el socio de gobierno del PSOE, Sumar, y también por los propios socialistas. «Es injusto con las empresarias y empresarios de este país suponer que van a ajustar cuentas con sus trabajadoras en base a un error que se ha reconocido públicamente y que se va a corregir de inmediato. Creo que la clase empresarial de este país no es insensible ni está esperando a que se produzca una grieta en el ordenamiento jurídico para despedir masivamente a sus trabajadoras», sostuvo la ministra.

También se dirigió a ellos la portavoz del PSOE: «Confío en el empresariado de nuestro país y creo que no van a aprovechar para hacer ajustes espurios en sus plantillas», aseguró Andrea Fernández.

Por su parte, la portavoz de Junts, Pilar Calvo, recriminó a la ministra la «falta de coordinación entre ministerios». Y la de Vox, María de los Reyes Romero, puso este fallo como otro ejemplo de «improvisación e incompetencia».