Fundado en 1910

El pleno del Congreso de los Diputados debatirá el próximo martes una proposición no de ley del PSOE para reducir la tasa máxima de alcohol al volante de 0,5 gramos por litro en sangre a 0,2, o lo que es lo mismo, de 0,25 miligramos en aire aspirado a 0,10, y para que sea única para todos los conductores.

En la exposición de motivos del texto, los socialistas argumentan que a pesar de que los conductores han aprendido a disociar consumo de alcohol y conducción, todavía un 32,7 % de los conductores fallecidos en 2023 presentaban una tasa de alcoholemia positiva, según datos del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses.

Según el PSOE, las investigaciones señalan que a partir de 0,3 gramos de alcohol por litro de sangre, y especialmente hasta 0,5, es decir, la tasa máxima actual, el riesgo de accidente se puede multiplicar por dos o incluso por tres, motivo por el que defienden la idoneidad de la proposición.

«Los mensajes sobre el consumo de alcohol y la conducción deben ser claros y contundentes para el conductor de tal forma que una tasa de 0,2 supondría en términos prácticos llevar a la norma la regla de que solo un consumo cero es seguro», indican.