Giro crucial en el caso Esther López: la juez imputa por fin al principal sospechoso
Ha aplicado al caso la Ley de Jurado, por lo que Óscar S. M. tendrá que sentarse en el banquillo
El caso de Esther López, la joven que apareció muerta en Traspinedo (Valladolid) el 5 de febrero de 2022 después de que desapareciera el 13 de enero, ha dado un giro que puede ser definitivo después de que la nueva juez encargada del caso haya decidido por fin la imputación del principal sospechoso de haber causado la muerte de la joven.
La jueza que hasta ahora se encargaba del caso se resistía a imputar al sospechoso, Óscar S. M., pero tras incorporarse a la Audiencia Provincial, la nueva juez preguntó a las partes qué pasos consideraban que debía dar. Y les ha obedecido porque ha dictado auto de imputación contra el único investigado en la causa por los delitos de asesinato/homicidio y omisión del deber de socorro.
Además, ha transformado las diligencias en procedimiento de la Ley del Jurado, por lo que Óscar se sentará definitivamente en el banquillo, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.
La decisión de la nueva instructora de sentar en el banquillo a Óscar S.M. era lo que la familia de la fallecida, en boca de su hermana Inés y de su letrado, venía demandando desde hace muchos meses al entender que toda la prueba practicada hasta entonces era más que suficiente como para imputar al único investigado como la muerte de la joven.
El abogado de la familia, Guillermo Ruiz Blay, había mostrado su pesimismo de obtener ya ese ansiado auto por falta de tiempo material, ya que la jueza abandona el juzgado para asumir su nuevo destino y siguen pendientes varios trámites por practicar, como resolver un recurso en la Audiencia Provincial sobre la petición de la defensa de acceder a las fotos de autopsia y la presentación del informe completo de un perito sobre la manipulación de la centralita del coche presuntamente implicado en el atropello.
En el lado contrario, la hermana de la víctima, Inés López, durante la concentración que familiares y amigos protagonizaron ante la puerta del Edificio de los Juzgados, coincidiendo con el referido interrogatorio a los peritos, albergaba entonces la esperanza de lograr la imputación del único sospechoso antes de que la jueza asumiera su nueva tarea judicial en la Audiencia vallisoletana.
«¡Sería una locura que no hubiera juicio!», advirtió entonces Inés, para quien sería igualmente un despropósito que la hasta ahora instructora se marchara sin confluir la investigación y que «la nueva jueza o juez que llegue tenga que verse más de dos mil folios de investigación» antes de resolver si sobresee o continúa por la vía del juicio con jurado popular.
Dos años y medio de investigación
Un atestado de la Unidad Central Operativa (UCO) y la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Valladolid avalaba la hipótesis de la autoría del crimen por parte de Óscar S.M, fruto de un «arrebato en caliente» tras una discusión de origen desconocido.
En dicho informe se apunta que la causa de la muerte fue el atropello por un turismo a velocidad media o baja cuando la víctima se hallaba de espaldas, con la confluencia de otros factores como la intoxicación etílica, el consumo de cocaína y la hipotermia, y que la mujer no murió en el acto sino que podía haber sobrevivido en caso de haber recibido cuidados paliativos, «con lo que pudo vulnerarse su derecho a la atención personal y asistencia sanitaria paliativa».
«En definitiva, Esther quedó como consecuencia del atropello sin posibilidades de defensa, desamparada a merced de su agresor, imposibilitada de obtener ayuda de terceras personas y sin capacidad real de oponerse», apuntaba el informe en el que se vinculaba en dicho atropello y posteriores hechos a la persona que la noche del 12 al 13 de enero de 2022 la llevaba en su vehículo, un Volkswagen T-Roc.