Marlaska se suma al Gobierno vasco en la concesión de terceros grados a etarras

El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) ha denunciado la concesión de cinco nuevos terceros grados a presos etarras, lo que supone el estado de semilibertad, sin que se hayan arrepentido de sus crímenes.

A pesar de la llegada del PSOE a la Consejería de Justicia del Gobierno Vasco, se mantiene la misma política llevada por el PNV de beneficiar con terceros grados cada semana a presos de ETA.

Pero, además, se da la circunstancia en esta ocasión de que dos de los cinco terceros grados han sido concedidos por el Ministerio del Interior. Y es que los dos presos semiliberados por el Gobierno de Pedro Sánchez permanecían en la prisión de Pamplona, donde el Gobierno vasco no tiene competencias.

Sin informar a las víctimas

Estos dos terceros grados fueron concedidos el pasado mes de abril, pero no ha sido hasta ahora, diciembre, cuando Covite se ha enterado de su progresión, lo cual quiere decir que el Ministerio del Interior no informó ni a las víctimas ni a las asociaciones de víctimas de la concesión de estos terceros grados a pesar de que se comprometió a ello. Por eso mismo, Covite ha enviado una carta al director de Instituciones Penitenciarias, Miguel Ángel Vicente Cuenca.

En la cárcel de Pamplona permanecen ya solo cuatro presos etarras. Posiblemente los más sanguinarios después de Henri Parot y Javier García Gaztelu 'Txapote'. Entre ellos, se encuentran Josetxo Arizkuren Ruiz 'Kantauri', condenado a cientos de años y procesado todavía en numerosos atentados sin juzgar por su pertenencia a la dirección de la organización terrorista, entre ellos, el de Miguel Ángel Blanco.

Tienen prohibido arrepentirse

Covite recuerda que ninguno de ellos se ha arrepentido de sus crímenes, por lo que no cumple el «requisito fundamental exigido por la ley» para acceder al tercer grado. Como prueba de ello, Covite argumenta que todos ellos continúan en la órbita de la izquierda abertzale y "son exhibidos como héroes en las 'herriko tabernas'.

A su juicio, no seguirían vinculados a la izquierda abertzale si se hubieran arrepentido, ya que este sector político «prohíbe expresamente desde hace muchos años a los presos de ETA el arrepentimiento y la colaboración con la justicia».

Covite ha lamentado que este «fraude» se produzca «con el beneplácito de todas las instituciones, incluso de la Fiscalía de la Audiencia Nacional».