Granada celebra su día más grande en la que reluce más que el sol

Dice la tradición popular que «hay tres jueves en el año que relucen más que el sol: Jueves Santo, Corpus Christi y día de la Ascensión». En Granada, sin duda, el jueves que más reluce es el segundo de ellos. El Corpus Christi es, indudablemente, la mayor fiesta de la ciudad.

La semana del Corpus es la semana de la feria de Granada. Durante estos días, las celebraciones llenan la ciudad. Hay actuaciones flamencas en las casetas del recinto ferial y en el centro, espectáculos de marionetas o chacolines en la Plaza Bib-Rambla, feria taurina o el desfile de la Tarasca.

Pero, sin duda, el acto central de la semana es la solemne procesión del Corpus Christi. Ese día, el aroma a juncia, romero, tréboles y otras hierbas aromáticas recolectadas en las faldas de Sierra Nevada, inunda las principales calles del centro de la ciudad. En la procesión del jueves de feria, que hoy se celebra, se rinde homenaje a la Eucaristía, por lo que el elemento principal del cortejo es la Custodia, que procesiona por las principales calles de la ciudad. Altares y toldos se colocan cada año a lo largo del recorrido que, como es tradicional, este año saldrá en torno a las 10:15 de la mañana por la puerta de la Encarnación de la catedral granadina.

Tras varias décadas sin alterar el trazado, este año el Cabildo de la Catedral se ha visto obligado a modificarlo. Debido al andamio situado en el Pie de la Torre, que reduce en exceso el espacio para el paso de la procesión, el itinerario será más largo de lo acostumbrado. El recorrido será el mismo de siempre hasta la plaza del Carmen pero, cuando el cortejo alcance la calle Cárcel Baja, girará después hacia San Jerónimo, plaza de la Romanilla, Capuchinas, plaza de la Trinidad, Mesones, Marqués de Gerona y, finalmente, regresar a la plaza de las Pasiegas, donde se ubica la fachada principal de la catedral granadina.

Como marca la tradición, la comitiva la abrirá la legendaria Tarasca, el popular maniquí, montado sobre un dragón alado, que este año ha sido vestido por la diseñadora Arantxa Orantes. Tras ella vienen los grupos de bailes regionales, que interpretan danzas populares tradicionales; las representaciones de las hermandades de la ciudad, los grupos religiosos, los niños que han recibido la Primera Comunión y el clero. Tras el paso que porta al Santísimo, viene el arzobispo de Granada, monseñor José María Gil Tamayo, y el resto de autoridades civiles y militares.

Regalo de Isabel la Católica a la ciudad

La primera Custodia del Corpus Christi fue regalada por la reina Isabel la Católica a la ciudad en 1501, aunque de ella sólo queda hoy el precioso templete, de planta hexagonal con chapitel.

A lo largo de los siglos, ha experimentado diversas modificaciones y añadidos, enriqueciéndola y convirtiéndola en la espléndida obra que hoy conocemos. La Custodia actual destaca por su compleja estructura, sus elaborados relieves y la presencia de numerosos elementos decorativos, como ángeles, medallones y filigranas.

El trono procesional para la Custodia fue concluido definitivamente en 1992 por el escultor Miguel Moreno, tras un complicado proceso de gestación que se alargó durante cuatro décadas.