Este tipo de alojamiento tiene diferentes modalidades, desde tiendas de campaña hasta bungalós o cabañas de maderaEuropa Press

Málaga

Los cámpines de la Costa del Sol baten récords de turistas españoles este verano

Esta modalidad de alojamiento es la única que no ha visto descender el número de viajeros nacionales en la provincia durante los meses estivales

Cada vez es más frecuente, no sólo en la Costa del Sol, sino en toda España, que los turistas de nuestro país se decanten por la opción del camping como alojamiento para sus vacaciones. El impacto que la pandemia causó en la sociedad y las restricciones a la hora de salir a la calle y disfrutar del aire libre han provocado que muchos vean en esta manera de viajar la forma idónea de disfrutar de la naturaleza de una manera más libre y saludable.

Buena muestra de ello son los datos que ha comunicado el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA) sobre el pasado mes de julio. En ellos queda reflejado que la provincia de Málaga es la tercera de Andalucía en número de hospedajes en sus cámpines, con 39.984 personas, sólo por detrás de Cádiz, con 84.545 turistas, y Huelva, con 50.352.

Por los recintos de la provincia de Almería han pasado 25.664 viajeros, mientras que por Granada han sido 21.258 y por Jaén 14.010. Únicamente dos provincias andaluzas han registrado menos de 10.000 visitantes en sus cámpines: Sevilla, con 5.796, y Córdoba, con 4.719.

Sin embargo, lo más destacable es que, de esos casi 40.000 huéspedes que han optado por estos alojamientos en la provincia de Málaga, 30.039 eran españoles, lo que supone un 75,1 % del total.

A pesar de esta gran diferencia en el recuento general, la balanza cambia de signo al hablar de pernoctaciones. Si bien los españoles ocuparon las instalaciones 125.887 noches (lo que supone una media de 4,19 días por viajero), los extranjeros pernoctaron 57.173 noches, alcanzando la media de 5,75 días por turista, siendo los ingleses los que que más tiempo han permanecido en la provincia, con una media de nueve días. Por el contrario, los portugueses y los italianos son los que antes abandonan nuestro país, con dos pernoctaciones de media por viajero.

A estos datos del mes de julio hay que añadir los ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en los que recoge la caída del turismo nacional en la provincia de Málaga: 80.000 viajeros españoles menos. Esto se traduce en un descenso del mercado nacional en todos los alojamientos turísticos, excepto en los cámpines, que mantienen el tipo y continúan fidelizando viajeros.

Las posibles causas de esta moda en alza, además de la necesidad de encontrarse con la naturaleza, apuntan a la reducción de presupuestos por parte de las familias para pasar las vacaciones, el deseo de vivir nuevas experiencias alejados de la rutina y lo conocido y la proliferación de los llamados ‘glampings’, alojamientos en plena naturaleza con todas las comodidades de un hotel de cuatro estrellas que, además de ser una novedad, combinan lo mejor de cada mundo y atraen cada vez a más viajeros deseosos de probar algo diferente.