Denuncian al alcalde de Casares por la explotación de canteras en zonas protegidas para su venta a Gibraltar

La asociación ecologista Verdemar Ecologistas en Acción ha comunicado su intención de denunciar al alcalde de la localidad malagueña de Casares, Juan Luis Villalón (Izquierda Unida), por incumplir la Ley 1/2014, de 24 de junio, de Transparencia Pública de Andalucía. El motivo, según la organización, es la falta de transparencia e información del Consistorio en relación con la legalidad de las actividades extractivas de las canteras en el municipio que, tal y como ya adelantó este medio, están favoreciendo la expansión territorial y urbanística de Gibraltar.

Los ecologistas llevan meses denunciando públicamente que varias canteras de las localidades malagueñas de Casares, Manilva y Estepona están surtiendo de piedra para escollera a proyectos urbanísticos de Gibraltar; un total de 50.000 toneladas de estas rocas tienen como destino la construcción de espigones y la remodelación del litoral.

«En estos últimos 25 años se han rellenado en la zona de actuación más de diez hectáreas, manteniendo el Gobierno de Gibraltar allí un vertedero de escombros y todo tipo de residuos que ahora pretenden utilizar en la nueva expansión hacia el Estrecho de Gibraltar, encofrándolos con hormigón», afirman desde la asociación.

Ahora, con esta denuncia, el grupo ecologista acusa directamente al Ayuntamiento de Casares de eludir sistemáticamente su deber y su responsabilidad de responder a las solicitudes de información y a las demandas de transparencia en referencia a estas extracciones, lo que vulnera la legislación vigente en Andalucía.

Pero, además de exigir al Consistorio que aclare la situación legal de las canteras, desde Verdemar piden la protección medioambiental inmediata y urgente del entorno puesto que, tal y como han señalado, estas extracciones están ocasionando graves daños al torcal más meridional de la provincia de Málaga, así como a todo el ecosistema de la Sierra de Utrera, el río Manilva, los baños de la Hedionda y sus hábitats protegidos por la legislación europea debido a su incalculable valor ecológico.

Unido a la importancia medioambiental de la zona, el patrimonio arqueológico es otro de los grandes bienes a proteger. La misma Sierra de la Utrera alberga nada menos que 92 cuevas, de las cuales 23 presentan signos de ocupación humana que datan del Paleolítico. Además, en estos enclaves se han encontrado restos que abarcan distintas épocas, desde el Mesolítico hasta el Neolítico, incluyendo destacables muestras de arte rupestre, así como restos de las primeras poblaciones que tuvieron contacto con los primeros navegantes fenicios que llegaron a las costas de la provincia.

Por todo ello, y tomando esta denuncia como primer paso, Verdemar hace un llamamiento a las autoridades competentes para que se proteja de manera urgente y certera la Sierra de la Utrera y los ecosistemas afectados, tanto para preservar los valores medioambientales como el patrimonio histórico-cultural de la zona.