El malabarista Michael Ferreri, Premio Nacional de Circo 2024MINISTERIO DE CULTURA

Sevilla

Este es el malabarista sevillano que cuenta con casi medio centenar de récords Guinness

El Ministerio de Cultura le ha concedido el Premio Nacional de Circo de 2024, cuya dotación es de 30.000 euros

Se llama Michael Ferreri, nació en Sevilla en 1996 y pese a pertenecer a una familia de amplia tradición circense, se consagró como malabarista de manera autodidacta.

Su juventud no le ha impedido haber cosechado, en su corta trayectoria, 40 récords Guinnes, cuatro de ellos logrados en 2023, lo que le ha permitido el reconocimiento internacional. Entre los logros más recientes, aparecen ser capaz de haber dado un mayor número de giros consecutivos de 360 grados mientras hacía malabarismos con cinco bolas por encima de la cabeza, o haber conseguido la mayor cantidad de capturas en tres minutos con seis bolas.

Además, forma parte de la historia de esta especialidad al ser el primero que consiguió realizar malabares con 11 bolas frente a una audiencia en directo.

Premio Nacional de Circo 2024

Ahora, el sevillano suma otro entorchado de postín, ya que el Ministerio de Cultura le ha concedido el Premio Nacional de Circo de 2024, cuya dotación es de 30.000 euros.

El jurado, reunido este jueves, ha destacado su «sobresaliente actividad como malabarista, que incluye la obtención de cuatro récord Guiness durante 2023».

«Su versatilidad y su capacidad para la innovación desde la excelencia técnica le han permitido adaptarse a contextos circenses, tanto tradicionales como contemporáneos, cautivando audiencias con su originalidad y su audacia en las técnicas malabares», ha resaltado.

Asimismo, han valorado «su carácter ecléctico y su capacidad de adaptación e integración a distintos espacios de exhibición y a los procesos creativos de otros artistas».

«Su trayectoria, un ejemplo de perseverancia y evolución constante capaz de inspirar a nuevas generaciones, lo ha convertido en un modelo a seguir en el mundo circense, que destaca tanto por su rigor en la técnica como por su labor de difusión de las artes del circo», concluye el fallo.

Miembro de una familia de tradición circense, en concreto cuatro generaciones, este sevillano comenzó con los malabares a los 11 años. A los 13, ya había hecho su debut en el reconocido circo noruego Cirkus Merano. Su carrera se impulsó en 2011, cuando se unió al Circus Vargas en los Estados Unidos. En 2014 volvió a Europa para actuar en el prestigioso Festival Mundial Du Cirque de Demain de París, donde se convirtió, con 17 años, en el artista más joven en competir en este evento. Se llevó la medalla de bronce y el premio especial Moulin Rouge.