El TJUE da la razón a Llarena y abre de nuevo el camino para la entrega de Puigdemont

Una pequeña gran victoria, la primera, para el magistrado del Supremo Pablo Llarena, instructor del juicio del 'procés'. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha dado este martes la razón al juez español al declarar que la Justicia belga no puede rechazar la entrega de los encausados por el referéndum inconstitucional del 1-O que, prófugos, están reclamados para responder penalmente de sus actos en España, entre ellos el expresidente catalán Carles Puigdemont, basándose en el riesgo de que se violen sus derechos fundamentales a un juicio justo.

La sentencia limita el margen de discrecionalidad de los jueces belgas o de otros países para negarse a entregar a los prófugos de la Justicia española

El TJUE ha rechazado, por lo tanto, en respuesta a la cuestión prejudicial planteada por el propio Llarena, que si no demuestran deficiencias sistémicas y generalizadas en España, que debiliten las garantías de un juez imparcial, ni se acreditan las dudas de los procesados sobre la competencia del Supremo como autoridad para emitir las euroórdenes que pesaron sobre ellos, no hay razón alguna para negarse a cumplir los principios de confianza y reciprocidad judicial que asumen todos los países miembros de la UE, por el mero hecho de serlo.

La sentencia dictada por la Gran Sala del tribunal europeo, ante la que no cabe recurso y es de obligado cumplimiento, despeja de este modo la consulta formulada en marzo de 2021 por el instructor de la causa del 'procés', en tres preguntas diferentes. Y, todo ello, después de que la Justicia belga descartase la entrega del exconseller Lluis Puig por considerar que el tribunal que debía reclamar su extradición debía ser el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y que de ser entregado en España, a manos del Supremo, podrían ponerse en riesgo derechos fundamentales básicos de cualquier presunto reo, como la presunción de inocencia.

El fallo de hoy permitirá al magistrado emitir una nueva euroorden contra el exconsejero catalán Puig, quien huyó con Puigdemont a Bélgica, en 2017, pero que a diferencia del expresidente no es eurodiputado y no goza, por tanto, de inmunidad. En el caso del expresidente de la Generalitat es probable que Llarena espere, precisamente, por este matiz, al pronunciamiento sobre el privilegio parlamentario del líder de JxCat que todavía está en manos del Tribunal General de la Unión Europea (TGUE).

Llarena acudió a la Justicia europea para aclarar tanto el alcance de la emisión de las Órdenes Europeas de Detención y Entrega (OEDE) emitidas por el Tribunal Supremo contra varios encausados, por su papel en el proces, entre ellos Puigdemont, como las razones para denegar la ejecución de tales euroórdenes. La sentencia de hoy es esencial para determinar su futuro judicial pendiente, también, de que el Tribunal General de la UE decida si le levanta o no la inmunidad que, provisionalmente, se mantiene suspendida por mandato parlamentario. Por el momento, además, Puigdemont ha perdido todos los recursos planteados para intentar anular la decisión de la Eurocámara de retirarle la inmunidad.