Junqueras: «Hoy quien gana es Cataluña con una amnistía sin exclusiones»

El presidente de ERC, Oriol Junqueras, considera que, quien sale ganando con el acuerdo firmado entre republicanos y PSOE, es Cataluña, y lo hace en diferentes ámbitos. En el de la amnistía, porque es para «todos, sin exclusiones, sin excepciones»; en el ámbito de la negociación política, porque se garantiza la continuidad de la mesa de diálogo para avanzar para «crear las condiciones necesarias para que los catalanes puedan decidir su futuro»; desde el punto de vista social, porque se «gana con el traspaso íntegro de Rodalies», con vías, catenarias, estaciones, señalización y programas informáticos, además de la garantía de la inversión necesaria; y en el ámbito de la financiación, porque se perdona a la Generalitat 15.000 millones de euros de la deuda que Cataluña tiene con el FLA, el Fondo de Liquidez Autonómica.

Junqueras también ha dejado claro que este acuerdo es para facilitar «la investidura» de Pedro Sánchez. La continuidad de la legislatura, ha precisado, será más «fácil» si se cumplen los acuerdos. «Si no demuestra buena voluntad en el cumplimiento del acuerdo, es evidente que la continuidad de la legislatura no podría ser. Seguro que a ellos les conviene ser buenos cumplidores de esos acuerdos», ha repetido en varias ocasiones el líder de ERC.

El presidente de Esquerra considera que el acuerdo «es una satisfacción, porque estamos aquí para trabajar por Cataluña y por toda su gente. Y cuando podemos aportar cosas positivas al bienestar de nuestra gente, a la democracia, estamos seguros de que es bueno para el conjunto de nuestra sociedad y de la democracia». Y es, por este motivo, en alusión a Junts, que se ha mostrado convencido en que «todos se comprometerán, todos ayudarán», porque es bueno para «el país y la sociedad», los acuerdos alcanzados.

En el ámbito de la amnistí, Junqueras ha explicado que se incluyen a todos los que participaron, de una forma u otra, en el proceso independentista, incluido los miembros de los CDR y de Tsunami Democràtic, y todos aquellos que «participaron en acto de protesta en contra de sentencias marcadamente injustas», ha precisado el líder de ERC.

Mesa de diálogo entre gobiernos

Junqueras, por otro lado, también ha destacado la reanudación de la mesa de diálogo porque «es una demostración de que el Gobierno español, el Estado, reconoce la existencia de un conflicto político. En sí mismo esto es importante», decía. Una mesa que tiene que ser entre gobiernos, el central y el catalán, y «no unos partidos en particular».

Eso sí, el líder de ERC se ha mostrado abierto a que puedan constituirse otros mecanismos de diálogo entre formaciones políticas que, «en ningún caso», tiene que excluir a la mesa entre ejecutivos. Junqueras lo justifica porque es necesario que haya una «negociación directa» entre representantes de los dos gobiernos, y por la «importancia de poder avanzar en el camino de establecer las condiciones necesarias para que la sociedad catalana pueda decidir su futuro, siguiendo los ejemplos de Canadá o de Irlanda del Norte».

Y en el ámbito de la financiación, dice que se han dado «pasos importantes, más que nunca», con el compromiso de que el Estado va a asumir una parte de la deuda que la Generalitat tiene con el FLA, en concreto unos 15.000 millones de los 72.000 que debe Cataluña. Y a eso hay que añadir, dice Junqueras, que permitirá ahorrar a la Generalitat 1.300 millones de euros «que se podrán poner al servicio de la gente».

Aragonès: «gran victoria»

Por otro lado, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès ha insistido en que la amnistía «no resuelve por sí sola el conflicto político» pero sí es una herramienta para «avanzar en la resolución». Y ha destacado que todas las personas «perseguidas por su compromiso con el país son más libres».

De hecho, Aragonès considera que se trata de una «gran victoria», fruto de ir acumulando decisiones y acuerdos «que implican también no dejar a nadie atrás». El presidente de la Generalitat dice que una vez superada la «represión» con la ley de amnistía, «esto nos obliga a implicarnos en una segunda fase de la negociación para abordar el conflicto político». En definitiva, de lo que se trata ahora es de «avanzar hacia el referéndum».