Política
Un exlíder independentista reconoce que la aplicación de la amnistía será «imprevisible»
El exlíder de la ANC Jordi Sànchez invita al independentismo a una «reflexión» y un «reset»
El exlíder de la ANC y exsecretario general de JxCat, Jordi Sànchez, ha afirmado este jueves que la aplicación de la ley de amnistía será «imprevisible» como consecuencia del «baipás» del poder judicial con respecto al legislativo que, bajo su punto de vista, existe en España.
Así lo ha dicho en declaraciones a La 2 y Ràdio 4 el mismo día en el que el Congreso de los Diputados debate y vota de forma definitiva la ley de amnistía, de la que el propio Sànchez se vería beneficiado tras su condena a 9 años de prisión por hechos derivados del proceso soberanista, si bien apunta que esta condena «no se reparará nunca con plenitud».
«No hay decisiones que reparen mis años de cárcel, es parcialmente una reparación, un reconocimiento de que las cosas no se hicieron bien por parte del Estado», ha asegurado Sànchez, que ha tachado de «decisión valiente» el impulso de la amnistía por parte del Gobierno.
A juicio de Sànchez, «una parte» del poder judicial está haciendo «pagar» al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, los apoyos del independentismo, y otra parte considera que «no tiene legitimidad» su presidencia.
Por ello, Sànchez considera que la amnistía debería ir acompañada «de un paquete de medidas legislativas que derogue la ley mordaza y reforme los mecanismos de elección del órgano de gobierno del Poder Judicial», y ha añadido que hoy en el Congreso hay una mayoría para llevarlas a cabo.
Repetición electoral
Sànchez también se ha referido a la aritmética parlamentaria en Cataluña derivada de las elecciones del 12M, y ha señalado que el PSC y ERC son «los dos actores que tienen la capacidad de decidir qué pasará en los próximos meses».
«El bloqueo de la investidura de Carles Puigdemont está en manos del PSC y repetir elecciones o elegir un nuevo presidente está en manos de ERC», ha apuntado.
Para el exsecretario general de Junts, en estos momentos «la prioridad número uno de los dirigentes de ERC es ver cómo ganan el congreso» del partido que se celebrará en otoño, por lo que «es difícil de predecir» qué harán los republicanos.
En cualquier caso, para Sànchez «sería razonable» un «mínimo acuerdo entre Junts, ERC y la CUP para tener el control de la Mesa del Parlament», y ha añadido que en esta legislatura los actores políticos deben tener la capacidad «de tejer grandes acuerdos» en materias como la financiación, las inversiones o la lengua catalana.
«Reset» independentista
Tras los resultados del 12M, en los que el independentismo perdió la mayoría absoluta en el Parlament, Sànchez ha opinado que el movimiento debe hacer «una reflexión a fondo» y «un 'reset' en muchas cosas que no se han hecho bien», ya que el independentismo «ha tocado fondo».
Esta reflexión también debe comportar «una renovación de liderazgos» en el movimiento, y dejar de lado los enfrentamientos entre partidos.