Política
Borrás dejaría el cargo si se lo pide su líder: «En Junts todo el mundo es ‘puigdemontista’»
La presidenta de Junts asegura que no se opondrá si Puigdemont le pide recuperar su cargo
Después de que los voceros de Carles Puigdemont adelantasen la semana pasada que el expresidente no tenía intención de cumplir la promesa que hizo antes de las elecciones autonómicas de abandonar la política activa si no era investido presidente, hoy se ha despejado otra incógnita sobre el futuro del candidato de Junts a la Generalitat.
En una entrevista para Catalunya Ràdio, la presidenta de Junts, Laura Borràs, ha confirmado que cedería su cargo a Puigdemont si este se lo pidiera. «En Junts todo el mundo es puigdemontista», ha insistido Borràs, y ha recordado que el expresidente dejó el puesto por voluntad propia.
Así, Borràs considera que Puigdemont no necesita «ningún cargo orgánico» para liderar Junts –de hecho, ya está ocurriendo–, pero ha señalado que no opondría resistencia si decidiese volver.
«Si alguien genera consenso en Junts es Puigdemont», ha rematado Borràs, que sigue condenada por corrupción y cuya influencia dentro del partido sigue menguando en favor del bloque que apoya al secretario general del partido neoconvergente, Jordi Turull.
Puigdemont dejó la presidencia de Junts en 2022, pero nunca ha dejado de guiar de facto a la formación: su retirada efectiva de la política activa abriría en el partido una guerra interna que, a día de hoy y con la amnistía recién aprobada, no parece interesar a ninguno de los implicados.
«Unidad independentista»
En la entrevista, Borràs también ha reclamado rehacer la «unidad independentista» en la Mesa del Parlamento para investir a Puigdemont. Así, la líder nominal de Junts pide buscar «todos los apoyos y alianzas» antes del 10 de junio para conseguir que Puigdemont adelante a Salvador Illa y sea el primero en someterse a un debate de investidura, para el que –sin la abstención de los socialistas– no cuenta con suficientes apoyos.
Se trata de una nueva llamada a filas a ERC, a quienes se quiere atraer hacia la «opción Puigdemont» por su independentismo, para alejarles del tripartito. Cabe destacar, no obstante, que en los últimos días representantes de ERC y de Junts han manifestado que han perdido el miedo a una repetición electoral, y que –llegado el caso– lo preferirían antes que facilitar una investidura de Illa.