El presidente de la Generalitat de Catalunya en funciones, Pere AragonèsEuropa Press

El laberinto catalán

ERC ha nombrado 546 cargos en tres años de gobierno, con un salario medio de 85.484 euros

Estos salarios generan malestar entre los funcionarios de carrera de la administración autonómica

El pacto, al parecer inminente, entre el PSC y ERC es mucho más que un acuerdo político: es un tratado laboral y financiero. Desde el digital Vilaweb, próximo a las posiciones de Carles Puigdemont –y por lo tanto en riesgo de ser considerado pseudomedio por parte de Pedro Sánchez–, se ha recordado que hay 580 cargos eventuales que viven con ansiedad el alumbramiento del acuerdo entre socialistas y republicanos.

Junts y ERC están enfrentadas, y desde Junts se desliza off the record que una de las motivaciones de ERC para fraguar una tercera edición del tripartito, tras las experiencias nefastas de 2006 y 2009 que dejaron a la Generalitat casi en quiebra, es «dejar a su gente colocada».

Entre los 580 cargos eventuales dependientes del gobierno catalán, 189 son altos cargos, 159 son asesores y 232 dependen de entidades y empresas públicas. De todos ellos, solo 34 ocupaban un cargo en la administración antes de que Pere Aragonés fuera elegido presidente de la Generalitat. En definitiva, ERC ha nombrado 546 altos cargos desde mayo de 2021.

Un problema financiero

Para ERC perder estos cargos es mucho más que un problema político: es un problema financiero, dado que Esquerra ha sufrido una merma de ingresos de alrededor de un millón de euros anuales, al caer en las últimas generales –celebradas hace poco más de un año– de 13 a 7 escaños, y al perder 13 diputados en el Parlament en las elecciones de mayo.

De ahí que ERC necesite mantener una plantilla, cuanto más abultada mejor, de altos cargos que paguen una cuota al partido para hacer frente a las obligaciones financieras resultantes de haber concurrido a tantas elecciones en un espacio tan breve de tiempo... y haber un obtenido en todas ellas un resultado por debajo de sus expectativas.

Remuneración

Entre los cargos nombrados por ERC los que reciben una remuneración más elevada son los altos cargos: secretarios autonómicos o directores generales con un salario de 93.160 euros anuales. Tampoco salen mal parados los directores de entidades públicas con un salario de 92.520 euros anuales.

Estos salarios generan malestar entre los funcionarios de carrera de la administración autonómica, dado que los que tienen una escala más alta, en el mejor de los casos llegan a una nómina de 77.511 euros anuales, casi 18.000 por debajo de la de los cargos digitales, a pesar de haber tenido que acreditar unos conocimientos y pasar una oposición que no se exige a los cargos políticos a los que se accede por afinidad ideológica o personal.

Illa ganará un 30 % más que Sánchez

El dimisionario Pere Aragonés recibe un salario de 137.506 euros anuales. Esta retribución es la que percibirá, en caso de ser investido, Salvador Illa, lo que llevará a la paradoja de que Illa cobre mucho más que su jefe político, Pedro Sánchez, que recibe un salario anual como presidente del Gobierno de España de 103.498 euros, entre los emolumentos correspondientes a jefe del ejecutivo y las asistencias al Congreso como diputado.