Una imagen de la presentación del cordón sanitario para vetar pactos en el Parlament con Vox y Aliança CatalanaEuropa Press

El laberinto catalán

PSC, Comunes y ERC sondean la abstención de la CUP y Aliança por si los republicanos sufren deserciones

El partido socialista no se fía de la disciplina en las filas de ERC

El partido socialista no se fía de la disciplina en las filas de ERC y ha instado a los Comunes y la propia ERC a que mantengan conversaciones informales con el partido anticapitalista bolivariano CUP, que tiene 4 escaños, y con la ultraderechista e independentista Aliança Catalana, con 2 diputados, para sondear la posibilidad de que se abstengan en la votación de investidura de Salvador Illa.

El PSC, ERC y los Comunes alcanzan la cifra mágica de 68 escaños necesarios para investir a Illa pero si algún diputado republicano no sigue la directrices del partido, que aprobó el apoyo a Salvador Illa por un estrecho margen de 550 votos, la designación del primer secretario como presidente de la Generalitat podría irse al traste.

Para evitar esta contingencia los Comunes han abierto conversaciones con la CUP, un partido con el que comparten espacio ideológico. En público la CUP ha mantenido su oposición a la investidura de Illa, pero en el PSC recuerdan que en el pasado fueron decisivos para la investidura de Puigdemont y del propio Pere Aragonés. La CUP gobierna con ERC en Gerona desde donde el alcalde cupaire, Lluc Salellas, escribió un tweet mostrando empatía con el momento difícil que vive ERC.

Aliança Catalana

Por su parte Aliança Catalana, que comparte grupo mixto con la CUP, es un partido apestado y tanto el PSC, como ERC, Comunes, la CUP y Junts firmaron recientemente un acuerdo para no mantener ningún contacto político ni con Aliança ni con VOX.

No obstante, las dudas que genera la cohesión interna de ERC, en plena crisis, ha llevado a que ERC haya enviado globos sonda a la alcaldesa de Ripoll y líder de AC, Silvia Orriols, sobre las posibilidades de que ella y su otro diputado se abstengan.

Los contactos se han realizado a través de alcaldes de ERC de las comarcas de Osona, Ripollés y la Garrotxa cercanos a Ripoll, feudo de Silvia Orriols, donde es alcaldesa. Si bien hasta ahora Orriols, que no tiene mayoría, gobierna por la abstención de Junts, los contactos informales de ERC podrían haber prometido estabilidad a Orriols en su Ayuntamiento si esta se abstiene en la investidura en el Parlament.

Esta posibilidad es muy difícil dado que en caso de repetición electoral todas las encuestas señalan que Aliança experimentaría un crecimiento importante, pudiendo llegar a doblar sus diputados.

La política catalana está acostumbrada a giros de guion inesperados, votaciones en el último segundo y renuncias imprevistas, así que ninguno de los protagonistas da por seguro nada hasta que la votación se haya celebrado.