Laura Borrás y Carles Puigdemont, este miércoles en Waterloo

Laura Borrás y Carles Puigdemont, este miércoles en WaterlooJunts

Política

Puigdemont hace oficial su candidatura a presidir Junts y relevar a Borrás, que cede a cambio de un sueldo

La actual presidenta, condenada por corrupción, acepta a regañadientes el reemplazo a cambio de liderar la fundación FunDem

Carles Puigdemont ha anunciado oficialmente su candidatura a la presidencia de Junts en el congreso que se celebrará este fin de semana en Calella de Palafrugell. El partido ha emitido un comunicado después de que el expresidente de la Generalitat se haya reunido con la actual presidenta de la formación, Laura Borrás, en Waterloo para escenificar su decisión.

De esta manera se da el pistoletazo de salida al congreso de Junts, que arrancará dentro de dos días bajo el lema Nació, Progrés, Llibertat, Independència. En la presentación del cónclave del partido separatista aliado de Pedro Sánchez, los dirigentes de Junts se definieron como la alternativa transversal al gobierno españolista de Salvador Illa y como única vía que garantiza el camino a la independencia.

El congreso convoca a 1.200 compromisarios, pero las votaciones de los órganos de dirección del partido están abiertas, de forma telemática, a los 6.000 afiliados de la organización post convergente.

Fusión con Demòcrates

En la previa del congreso se ha formalizado en Bélgica la integración de la micro-formación independentista Democràtes en Junts. Demòcrates es un pequeño partido que nació como escisión de la extinta Unió Democràtica de Duran i Lleida y Sánchez Llibre, y que a lo largo de los últimos años ha pactado primero con ERC y luego con Junts para acabar disolviéndose dentro del partido de Puigdemont.

La fusión entre Demòcrates y Junts permite resolver uno de los sudokus de este congreso que no es otros que el reacomodo de Laura Borràs, que será relevada en la presidencia del partido y sustituida por Puigdemont, a pesar de que este prometió en la última campaña electoral que abandonaría la política si no era elegido presidente de la Generalitat.

El realojo de Borràs no ha sido fácil, dado que está condenada a cuatro años y medio de cárcel e inhabilitada por trocear contratos públicos en favor de un amigo suyo cuando ocupaba el cargo de directora del Instituto de las Letras Catalanas.

La presidenta de Junts, Laura Borràs, en un mítin.

La presidenta de Junts, Laura Borràs, en un mítin.Europa Press

Borràs exigía para abandonarla presidencia, sin provocar tensión interna, un cargo remunerado, dado que no puede ser cargo electo. La absorción de Demòcrates por parte de Junts se ha concretado mediante la creación de un think tank que será presidido por Borràs.

Así lo recoge el comunicado de Junts, que señala que Borràs tiene «el convencimiento de que el lugar desde el cual puede seguir sirviendo al proyecto del partido y al movimiento independentista es a través de la fundación». En su nuevo cargo, Borràs podrá percibir un salario, dado que los think tanks vinculados a los partidos con representación en el parlament de Cataluña reciben financiación pública.

Vicepresidentes

Junto al desembarco de Puigdemont en la presidencia del partido, cargo que ejercerá a distancia desde Waterloo (Bélgica), se confirmará a Jordi Turull como secretario general y se nombrarán tres vicepresidentes, todos ellos de máxima confianza de Puigdemont: el hasta ahora líder de Demòcrates, Antoni Castellà, la portavoz de Junts en el Congreso, Miriam Nogueras y Josep Rius.

Los perdedores, a priori, del congreso, son el entorno de Borràs -ideológicamente tan radical como el de Puigdemont- y la considerada ala más pactista de Junts personificada en el ex alto cargo de CaixaBank, Jaume Giró.

El congreso debatirá tres ponencias, pero la posición de apoyo crítico a Sánchez a la espera de la aplicación integral de la Ley de amnistía se mantendrá. En Junts no las tienen todas consigo y temen que su apoyo a Sánchez sea estéril por la grietas que se le abren al presidente entre otros grupos como Podemos o Ábalos, sin los cuales la legislatura colapsa.

Por ahora, sin embargo, no van a romper la baraja y por eso dan una de cal y otra de arena al, por un lado, cambiar de posición en el tema de la regulación del alquiler, pero por el otro apoyar la posición de las grandes energéticas y la patronal catalana, Foment del Treball, en relación al impuestazo sobre la banca y las energéticas.

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