
Padres y alumnos en el patio de un colegio durante el primer día del curso escolar en Barcelona,
Educación
El negro futuro de las concertadas en Cataluña: la Generalitat les da la espalda en plena crisis demográfica
La escuela concertada ha perdido 15.000 alumnos en los últimos cuatro cursos
Las escuelas concertadas de Cataluña han perdido más de 15.000 alumnos en los últimos cuatro cursos, según datos de la consejería de Educación y FP de la Generalitat. Desde el departamento aseguran que es un «goteo estable» de 3 ó 4 cierres cada año, sobre un total de 671 centros concertados, y que se debe a fusiones de centros, a integraciones a la red pública (se han contabilizado 15 con esta fórmula) o a cierres de centros. En total, 23 escuelas de este tipo han cerrado en los últimos cuatro años.
Y sobre todo, aseguran que la bajada de la natalidad tiene una incidencia importante, especialmente en el caso delas escuelas más pequeñas. En este sentido, la consejería apunta a que, en estos casos, se suele hacer un acompañamiento y se estudia caso por caso para facilitar la transición a las familias, al alumnado y a los trabajadores del centro.
Pero las propias escuelas concertadas ponen otra cuestión encima de la mesa. La infrafinanciación y el ahogo financiero al que les ha ido sometiendo los últimos gobiernos de la Generalitat, sobre todo con ERC. La consejera de Educación, Esther Niubó, ha reconocido que estos centros tendrían que disponer de una mejor dotación presupuestaria. Y en ello están, dicen desde el Departamento, aunque si esta era la intención del gobierno catalán, la falta de unos nuevos presupuestos, complica, y mucho, el panorama.
El próximo curso van a cerrar dos escuelas en Cataluña. Se trata de la Escuela Mireia del Fort Pienc de Barcelona, que inició su actividad hace 65 años. La dirección del centro atribuye el cierre a la baja natalidad, pero sobre todo a la ampliación de la oferta de centros públicos en la zona y las políticas educativas que priorizan la red pública. De hecho, el curso pasado ya cerró otra concertada en la zona, el Sagrado Corazón.El otro caso es el del colegio Sant Ferran de Castelldefels. Unos 300 alumnos, desde infantil 4º de ESO, deberán cambiar de escuela el próximo curso. Los propietarios del centro dijeron que cerraban porque el descenso de alumnado en los cursos de infantil y la previsión de que la natalidad continúe a la baja. Este curso ya perdieron el concierto de infantil 3 porque no había suficientes alumnos.
Y, en medio de esta situación, están las familias, quienes rebaten ese argumento. Asegura que la escuela no tiene pérdidas, y, en cualquier caso, lamentan la actitud de la Generalitat, puesto que en ningún momento les ha ofrecido una alternativa menos traumática. Pero la Generalitat lo tiene claro: la decisión es firme.
Las patronales de la escuela concertada recuerdan el estudio «el coste de acceso a la escuela concertada en España», elaborado por Esade, y que analizaba la financiación de las escuelas de iniciativa social. En ese informe, explican, se demuestra que Cataluña es la comunidad autónoma donde los centros concertados están más infrafinanciados. De hecho, la mitad de las escuelas de este tipo están situados en el tercio más bajo de financiación pública, lo que obliga, aseguran, a que para equilibrar la situación financiera se pidan cuotas a las familias.
Un informe de la Sindicatura de Greuges de Cataluña, también alertaba que el déficit de los centros concertados es de 1.500 euros para una plaza de primaria, y de 1.800 para secundaria. Las escuelas que reciben financiación explican que, tanto en la red pública como en la concertada, es la administración la que paga el sueldo al profesorado.
Pero, en cambio, la gran diferencia está en los suministros, el mantenimiento, obras… en estos casos, en la pública, la administración lo cubre todo, pero no así en la concertada, que tiene que hacer frente a la mayoría de gastos que esto supone. Y eso es un 40% menos de ingresos por parte de la administración que la escuela pública. De ahí que defiendan que necesiten más financiación para ser «gratuita», como la pública.