Difícil de creer la velocidad a la que circulaba este vehículo
Delito
Nuevo récord de velocidad en carretera abierta: la DGT no da crédito
Muy pocos vehículos en el mundo alcanzan la velocidad a la que se grabaron estos dos jóvenes al volante de un BMW
Ni los más antiguos del lugar recuerdan un exceso de velocidad tan salvaje como este registrado en la localidad andaluza de Málaga.
Una vez más las redes sociales han sido la perdición para este delincuente, que ha sido localizado tras compartir el vídeo grabado por su acompañante recientemente.
Dichosas redes sociales
Hace ya meses que la Guardia Civil en colaboración con la Policía Local de Málaga tenían acceso a las imágenes y ponían en marcha la investigación policial que finalmente daría con la identificación del responsable, que por el momento no se ha dado a conocer.
Un fotograma del vídeo en la autopista andaluza
Sin limitación
Lo curioso es que este modelo tiene la velocidad máxima limitada a 250 kilómetros/hora, lo que significa que disponía además del kit específico que deshabilita este límite de velocidad.
El BMW pasa demasiado cerca de otros coches con maniobras muy peligrosas
El conductor mantiene una velocidad que de acuerdo con el marcador roza los 300 kilómetros a la hora, en concreto 298, con la salvedad de que se trata de un tramo que está limitado a 100 kilómetros a la hora. Un exceso de velocidad de 200 kilómetros a la hora.
Un delito tipificado
En este caso el culpable se enfrenta a un delito contra la seguridad vial por vía penal, por lo que tendrá que hacer frente a un juicio en el que de acuerdo con los artículos 50 a 53 podría caerle una pena de prisión en función de los antecedentes que pudiera tener y de las circunstancias.
En paralelo y de acuerdo con el Reglamento General de Circulación hará frente a una multa de 600 euros, a lo que habrá que sumar 6 puntos del carnet y la retirada directa del carnet de conducir entre uno y cuatro años.
En las imágenes pueden verse algunos agravantes como son cambiarse de carril de manera violenta, adelantar por la derecha e incluso pegarse demasiado a otros automóviles, lo que podría suponer una denuncia adicional por conducción temeraria.
