Restaurantes
Este es el exclusivo restaurante del Raval donde Sánchez comió con Illa en su visita a Barcelona
En el mismo reservado se reunieron, en 1985, el Rey Juan Carlos I y Jordi Pujol
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no perdió el tiempo en Barcelona. Tras reunirse con el presidente de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès, Sánchez mantuvo un almuerzo de trabajo con el primer secretario del PSC y candidato a la presidencia de la Generalitat, Salvador Illa.
Aunque no ha trascendido de qué hablaron los dos líderes socialistas –tal vez Sánchez puso a Illa al día de si cómo su encuentro con Aragonès había hecho avanzar el pacto con ERC, pese a que ambas partes desvincularon el encuentro de las negociaciones de investidura–, sí se ha hecho público qué restaurante escogieron para su encuentro.
Se trata del exclusivo Ca l’Isidre, toda una institución en el barrio del Raval de Barcelona. Fundado en 1970, el restaurante presume de «cocina catalana contemporánea» y de «producto de temporada», comprado en el cercano mercado de la Boqueria. «El servicio es impecable y la comida extremadamente rica», asegura un reseñista en Google Maps.
El Rey y Jordi Pujol
Sánchez e Illa comieron en el reservado del local, el mismo espacio que hace casi 40 años compartieron el Rey Juan Carlos I y el entonces presidente de la Generalitat, Jordi Pujol. El monarca y el político catalán –de cuya confesión de haber mantenido una fortuna oculta hoy se cumplen diez años– se sentaron a la mesa acompañados por sus mujeres, la Reina Sofía y la recientemente fallecida Marta Ferrusola.
Aquel encuentro tuvo lugar el 19 de mayo de 1985, en la segunda visita a Cataluña del Rey después de la muerte de Franco. Según detalla el periodista y director de El Nacional, Josep Antich, en su libro El Virrei, fue un almuerzo planificado «al milímetro» por el secretario general de Presidencia de la Generalitat, Lluís Prenafeta.
Los cuatro comensales llegaron a la calle de les Flors en un Mercedes azul conducido por el propio Rey Juan Carlos. El dueño del restaurante, Isidre Gironès, les sirvió pulpitos con jamón, esqueixada de bacalao, surtido de setas y calabacines florecidos rellenos de foie-gras. El Rey comió cabrito al horno y la Reina, lenguado meunier con verduras al vapor. Los Pujol, por su parte, tomaron salmonetes a la crema de tomate.