El Cristo hiperrealista de 'The Mystery Man' llega hoy a Barcelona: «Algunos lloran, nadie queda indiferente»

Más de 200.000 personas han visitado ya la exposición itinerante The Mystery Man, «y a nadie le ha dejado indiferente», asegura Francisco Moya, CEO de Artisplendore, la empresa organizadora. La muestra, que ha pasado ya por Salamanca, Guadix, Chioggia y Caravaca de la Cruz, aterriza este jueves 5 de septiembre en el centro de Barcelona, en la Basílica de Santa Maria del Pi.

Aunque la inauguración institucional tendrá lugar el jueves 19, The Mystery Man abrirá desde hoy sus puertas a vecinos y turistas. Su plato fuerte sigue siendo la escultura hiperrealista de Jesucristo a tamaño natural realizada a partir de las coordenadas científicas y forenses de la Sábana Santa. Moya atiende a El Debate pocas horas antes de abrir las puertas para explicar qué pueden esperar los barceloneses de esta exposición.

–¿Qué novedades incluye la exposición en Barcelona?

–La exposición llega a Barcelona completa, y es la misma que en las cuatro ciudades anteriores, lo que cambia es el entorno. The Mystery Man queda muy integrada en el entorno gótico, y hemos incorporado en la cripta la proyección de videomapping. Lo que sí cambia es que hemos realizado una limpieza a la escultura de Cristo, que tiene ya diez años y llevamos dos años moviéndola por el mundo: ya era sorprendente, pero ahora ha quedado espectacular.

–Barcelona es una ciudad muy secularizada, ¿cómo esperáis que sea la recepción de la exposición?

–Barcelona es una buena tierra, ya trabajamos ahí en la experiencia de realidad virtual en la catedral. Respecto a The Mystery Man, es una exposición que ubicamos en espacios religiosos, pero que está abierta absolutamente a todo el mundo, y es muy respetuosa con las creencias de todos. Ya desde el mismo título: los cristianos no tenemos duda alguna de quién es la figura de la Sábana Santa, pero no hablamos de Jesucristo sino del «hombre misterioso».

–¿Hay alguna duda de que el hombre representado en la Síndone sea Jesús de Nazaret?

–Estamos hablando de la imagen más representada de la historia de la humanidad, la más famosa del mundo. De lo que no hay ninguna duda es de que hace al menos 1.400 años, o más, que el rostro que aparece en la Sábana Santa se ha usado para representar a Jesús. Se le pinta con barba y pelo largo porque así es como aparece en la Síndone.

–A la Sábana Santa le ha rodeado siempre mucha polémica sobre si es auténtica, o si es un artefacto medieval… Recientemente se hicieron públicos los resultados de un estudio en Italia que apuntaba a que procede, efectivamente, del siglo I. ¿Cree que este tipo de noticias influyen en la exposición?

–Sí, vi estos estudios que confirman que estamos hablando de lino de la época de Jesucristo. Nosotros no nos queremos meter tanto en las polémicas, pero lo que sí es cierto es que el hombre de la Sábana Santa es un misterio. Por un lado, por lo que te comentaba de la representación de Jesús, pero es que además aún no se ha resuelto el cómo quedó impregnada la imagen en la tela. Bueno, ¡eso es lo bonito de los misterios!

–¿Qué reacciones han tenido los visitantes ante la escultura?

–De todo. Entra gente de todos los públicos, de todas las nacionalidades, y su reacción va muy en consonancia con su creencia o su situación. Hay quien llora ante las heridas, hay quien reza. Algunos se sorprenden del realismo de la obra. Lo que está claro es que nadie queda indiferente. La exposición está pensada de tal manera que antes de llegar al cuerpo te has hecho una idea de la Pasión de Jesucristo y de la historia de la Sábana Santa, así que cuando llegas ahí ya estás preparado. A partir de ahí, solo queda contemplar.