Cataluña
Santa Coloma de Gramenet ofrece talleres para niños de primaria sobre diversidad sexual y nuevas masculinidades
Vox ha pedido al Ayuntamiento que deje de financiar estas actividades por su contenido ideológico, y porque los padres no están informados
El Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet financia programas de actividades educativas, dirigidas a menores de edad, en las que se plantean temas como el sexo, la identidad de género, el consumo de estupefacientes o la inmigración. Así lo ha denunciado el grupo municipal de Vox, que lamenta que, no solo el contenido está «fuera de lugar», sino que se hacen sin la autorización de los padres o del tutor legal de los menores.
Así, por ejemplo, se ofrece un taller para alumnos de educación infantil, que se llama: «los juegos y los juguetes, ¿de niños o de niñas?». Se explica que el objetivo es «leer, a través del juego, cómo los niños perciben la diferencia sexual». Y también se dice que la actividad, lo que pretende, es favorecer el aprendizaje, promoviendo la «coeducación» y la convivencia igualitaria en el grupo.
Para niños de primaria, en concreto para los de segundo y tercer ciclo, también está disponible el taller sobre «En la variedad está el gusto. Taller para visibilizar la diversidad sexual y de género». En este caso, se trata de promover y «visibilizar la diversidad sexual y de género y familiar». Para ello, se asegura que se creará un «espacio de intimidad» en el que los niños conozcan que hay lesbianas, gais, bisexuales, personas no binarias y trans. Y, para ello, «compartirán vivencias propias, que nos permitirán reflexionar y cuestionar las rígidas normas machistas sobre la identidad de género y la orientación afectivo-sexual».
Para alumnos más mayores, de ESO, y también bachillerato y ciclos formativos, se ofrece una actividad titulada: «Solo sí es sí. Taller de prevención de violencias sexuales». En la descripción de la iniciativa, se deja claro que «las violencias patriarcales toman muchas formas» y una de ellas es la sexual. Se denuncia que hay un sistema que «normaliza y perpetúa comportamientos y actitudes abusivas», y que actúa con «impunidad ante la opinión pública y la justicia patriarcal».
Para el mismo público va dirigido el taller «masculinidades y sexualidad. La influencia de la pornografía en el deseo y en el consentimiento». La idea es hacer una presentación sobre «pornografía hegemónica y construcción del deseo sexual masculino». Y se deja claro que se trabaja con «capturas de pantallas de títulos de vídeos reales, así como con imágenes en las que se ven escenas creadas de violencia».
También llama la atención una actividad dirigida a niños de quinto y de sexto de primaria, que versa sobre «placeres que abren mundos. Sexualidad y diversidad sexual y de género. Entre los objetivos de este taller está el de relacionar la sexualidad con el placer y el juego, hablar con naturalidad sobre esa diversidad o fomentar la solidaridad hacia las personas LGTBIQ+. También se explica que, en la primera sesión, utilizarán una «metodología participativa». Para ello, «jugaremos individualmente a hacernos cosquillas con unos pinceles para enlazar, a través de las cosquillas, como metáfora del placer».
Se trata solo de algunos ejemplos, pero también hay talleres para profundizar «en el aprendizaje sexual» mediante una especie de concurso de preguntas relacionadas con el sexo. Pero también hay actividades para tratar las «migraciones» y la «diversidad», en este caso dirigidas a niños de primero y de segundo de primaria. Y talleres en los que se alienta a los niños a reflexionar sobre el impacto en el medio ambiente «del consumo excesivo de juguetes» o en la «producción bajo explotación» de estos artilugios.
Ante este panorama, y teniendo en cuenta que los talleres van dirigidos a menores de edad, desde Vox han pedido al Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet que deje de financiar estos talleres y actividades que «puedan corromper la inocencia de los menores». Y también demandan que se envía una circular a cada centro educativa para que cualquier actividad extracurricular que requiera la asistencia de un menor, «tengan conocimiento los padres o tutores legales y sean ellos quienes decidan si el menor participa en la actividad o no».
El portavoz de la formación, Aitor Navarro, asegura, de forma irónica, que no sabe cómo «se puede encajar en una clase de matemáticas, un taller de cómo hacer cosquillas con pinceles para crear un vínculo afectivo-sexual». Teniendo en cuenta lo que se enseña en estas actividades, añade, «se pueden explicar los resultados de los informes PISA, porque la educación no funciona». Y de lo que se trata es de «reforzar las matemáticas o la lengua, la castellana o la catalana, no otro tipo de lengua, que aquí ya alguno mal piensa», apuntaba Navarro
Pero el concejal de Vox también señalaba otra contradicción. Y es, por ejemplo, que los alumnos no puedan llevar el móvil a clase, pero sí se pueda ver porno en una clase de física. Para él, todo esto es un «sinsentido». Y, en cualquier caso, pide que se informe a los padres sobre este tipo de actividades extracurriculares, del mismo modo que «cuando yo me iba de excursión y mi padre firmaba una autorización para que pudiera ir a la montaña».