Lluis Llach en la manifestación del sábado 9 de noviembre de 2024.
Política - sociedad
La Fundación de Lluís Llach acumula pérdidas desde 2019 y mantiene ocultos sus balances financieros
Aunque la organización incluye a influyentes miembros del patronato, sus movimientos financieros son mínimos.
La Fundación Lluís Llach, encabezada por el exlíder de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), lleva años sin divulgar sus resultados económicos, pese a que continúa activa, según información publicada en El Confidencial. En su página web, el último balance disponible corresponde a 2020, y desde entonces no se han presentado nuevas cifras. La fundación realiza actividades en Palmarin, Senegal, una zona costera ubicada en el delta del Sine-Saloum, a unas tres horas y media al sur de Dakar, donde su presencia se limita a pequeñas iniciativas a pesar de contar en su patronato con socios adinerados.
Lluís Llach creó la fundación en 2010 en Madrid, aunque operaba desde la calle Sepúlveda de Barcelona. La elección de Madrid se debió a razones económicas, ya que en ese momento constituir una fundación a través del Ministerio de Justicia costaba 30.000 euros, mientras que hacerlo en Cataluña requería 60.000. Tras una reducción de tarifas impulsada por el entonces presidente Artur Mas, la fundación se trasladó al registro catalán. A pesar del ahorro, el capital inicial desembolsado fue de solo 8.000 euros, quedando otros 22.000 euros pendientes para ser aportados en un plazo de cinco años.
En ocasiones, la fundación intentó acceder a fondos públicos, solicitando, por ejemplo, una subvención de 70.000 euros al Ayuntamiento de Barcelona, que fue rechazada por falta de solidez en el proyecto presentado. Actualmente, la fundación busca financiación a través de eventos como cenas benéficas. La última, realizada el 13 de julio en Verges, donde reside Llach, ofrecía entradas a 65 euros, con opciones de 'fila cero' a 250 euros y 150 euros para quienes quisieran desgravaciones fiscales.
Posicionamiento político y composición del patronato
La fundación de Llach también se manifiesta en temas políticos a través de sus redes sociales. Entre otras posiciones, critica acciones percibidas como hostiles hacia Cataluña, y apoya causas como la del periodista Pablo González, detenido en 2022 en Polonia por supuesta actividad de espionaje y posteriormente intercambiado por espías occidentales.
El comité directivo de la fundación está compuesto por Llach como presidente, Andreas Claus como secretario y seis vocales: Jordi Pascual, Oriol Presas, Albert Costa, Àngels Massagué, Mariona Anglès y Paquita Colomí. Además, el patronato incluye a Rosa Español Massaguer.
