Varios ayuntamientos catalanes disimulan una subida de impuestos con las zonas de aparcamiento

Uno de los aumentos de impuestos indirectos que algunos ayuntamientos catalanes están llevando a cabo en la aprobación de las ordenanzas fiscales es subir el precio de las zonas verdes y azules. El que más interfiere en este sentido es el de Barcelona, ciudad que cuenta con 61.493 plazas de área verde, de las cuales 2.966 se destinan exclusivamente a residentes, además de otras 6.064 clasificadas como zona azul.

La zona azul en Barcelona en la zona A pasará a costar 2,80 euros, mientras que la zona B costará 2,55 euros. Por su parte, los no residentes de la zona verde pagarán 3,30 euros en la zona A y en la zona B, 3,05 euros. Se trata de una subida respecto a los precios actuales: la primera está entre los 2,25 y los 2,50 euros, mientras que en la segunda tenemos los 2,75 y 3 euros.

Ahora bien, si hablamos del potencial contaminante, es decir, el adhesivo que llevan los coches basados en los niveles de contaminación, estos deberán pagar un importe extra. Para los que disponen del distintivo C, la cuantía será de 0,90 euros, mientras que aquellos con adhesivo B pagarán 1,15 euros. Los que no dispongan de etiqueta ambiental sufragarán 1,40 euros.

Los vehículos 0 y ECO se librarán de este recargo el próximo año. Estos precios suponen un incremento respecto a este año, en el que los vehículos C abonan un recargo de 0,75 euros, los B de 1 euro y aquellos sin adhesivo pagan 1,25 euros adicionales cada hora.

Autocares

Los autocares con adhesivo C pagarán 15,10 euros respecto a los 13,50 euros actuales, mientras que aquellos con etiqueta B pasarán de 15 a 16,80 euros, y aquellos que no dispongan de distintivo ambiental abonarán 20,15 euros en 2025, una subida de 2,15 euros respecto a los 18 euros actuales.

En la zona azul B, los precios pasarán de la gratuidad a 2,80 euros para autocares cero emisiones; de 4 a 4,45 euros en los ECO; de 4,50 a 5 euros para los C, y de 5 a 5,60 euros para los B. Los autocares sin distintivo pasarán de pagar 8,50 a 9,50 euros cada hora. Para obtener un permiso diario sin reserva previa, los 20 euros actuales se incrementarán hasta los 35 euros el próximo año.

Granollers y Mataró

Esta manera de actuar de muchos municipios no es nueva. Es una manera de cobrar impuestos indirectos para conseguir más ingresos. Por ejemplo, el Ayuntamiento de Granollers ha aprobado que, a partir de l 1 de enero de 2025, la tarifa de la zona verde se incremente en un 48 % y la azul en un 5 %.

Alguien puede decir que esto es poca cosa. Vamos a poner un ejemplo. Supongamos que una hora de estacionamiento en Granollers, en zona verde, cuesta 1,5 euros. A partir de 2025 esta hora costará 2,22 euros. Eso quiere decir que el ayuntamiento recaudará 0.72 euros extra por vehículo.

Supongamos que, a lo largo de un día, aparcan 1.000 vehículos. Con el precio normal ingresaban 1.500 euros diarios. A partir de 2025 serán 2.200 euros. Esto son 600 euros más diarios. Si descontamos que hay una serie de días que no se cobra, multiplicamos el diario por 300 días, el resultado es 660.000 euros con respecto a los 450.000 euros. En definitiva, el ayuntamiento de Granollers, con estos números facturará 210.000 euros más anualmente.

Con respecto a la zona azul, el coste es menor, pero no deja de ser positivo el aumento de ingresos. Otro ayuntamiento que ha hecho de las suyas es el de Mataró. En vez de subir uno u otro porcentaje, ha decidido igualarlos. Con lo cual aparcar en Mataró costará igual si es en zona azul o verde.

Y así muchos otros ayuntamientos de Cataluña que, vendiendo un pequeño incremento, si tenemos en cuenta los 0,72 euros de Granollers, al final se convierte en unos ingresos considerables para compensar el presupuesto municipal.