La ley de los clanes va más rápida que los Mossos: ‘paz’ en la Mina a cambio de dos expulsiones

Tras el intenso tiroteo entre dos clanes que sacudió el barrio de la Mina de Sant Adrià de Besós (Barcelona) la semana pasada, la ‘paz’ ha vuelto al barrio, una de las principales no-go zones de Cataluña. No lo ha hecho, sin embargo, gracias al despliegue de unidades antidisturbios de los Mossos d’Esquadra, ya que la policía catalana no ha realizado aún, a día de hoy, ninguna detención.

Ha sido, según adelanta El Periódico, siguiendo la ‘ley de los clanes’: las dos familias enfrentadas en la reyerta han sellado la paz a cambio de que un miembro de cada una de ellas abandone el barrio durante medio año. El pacto entre las dos estirpes gitanas se selló una vez las cámaras abandonaron la Mina, barrio que contó incluso con la visita del presidente de la Generalitat, Salvador Illa.

Por más que Illa repitiese entonces que no iban a permitir que hubiese «impunidad», el desenlace del tiroteo –más de 150 disparos en los que una mujer resultó herida leve por una bala perdida– ha llegado sin intervención policial, siguiendo la ley de la selva que impera en el barrio a pesar de las palabras del líder socialista.

«Hemos visto a los Mossos el jueves, el viernes, el sábado, el domingo… Los primeros días hubo un poco de revuelo y sentimos temor, pero ya se ha acabado todo», señala una vecina en declaraciones al citado medio. Según recoge El Caso, no es la primera vez que estas mismas dos familias pactan un alto el fuego al acudir la policía tras una escalada de tensión.

Los Mossos mantienen abierta la investigación, en un caso que están trabajando conjuntamente las unidades de la División de Investigación Criminal y las comisarías de Sant Adrià y Badalona. El objetivo de los agentes, según el digital especializado en sucesos, es poder acreditar el vínculo entre los autores del tiroteo y el tráfico de armas o de droga, para que lleguen a entrar en prisión.