Laura Mengó y Paula Nieto, nuevas Falleras Mayores de Valencia 2023.

Laura Mengó y Paula Nieto, nuevas Falleras Mayores de Valencia 2023.JCF/ARMANDO ROMERO

Comunidad Valenciana  Valencia ya tiene falleras mayores para 2023

Laura Mengó y Paula Nieto han recibido la llamada del alcalde para informarles de que serán las caras visibles de la fiesta

Los valencianos suelen decir que las Fallas del año siguiente comienzan desde el mismo momento en que los monumentos aún están ardiendo. Aunque desde el punto de vista sentimental pudiera ser así, se podría decir que la cuenta atrás para una de las fiestas populares más importantes de España ya ha empezado.

Y lo ha hecho con la tradicional llamada telefónica del alcalde, en este caso, Joan Ribó, a las falleras mayores de 2023 para comunicarles que desde ya son la cara visible de las Fallas y las encargadas de hacer llegar a todo el mundo el mensaje de invitación durante la semana grande en la ciudad, desde el 14 de marzo al 19.

De este modo, Laura Mengó será la nueva fallera mayor. Tiene veinticinco años, completó la carrera de Enfermería y actualmente trabaja en el departamento de maternidad del Hospital La Fe de Valencia, uno de los más prestigiosos de España.

En cuanto a aficiones, practica natación y pádel y, concretamente en el ámbito fallero, se decanta por la ‘Plantà’ (la noche en que los monumentos quedan listos definitivamente para la visita del Jurado), y la Ofrenda a la Virgen de los Desamparados los días 17 y 18 de marzo.

Heredera de una amplia familia de tradición en la fiesta valenciana, Mengó ya fue fallera mayor Infantil en 2006 y su elección se ha tomado como un guiño hacia la visibilidad social de la incapacidad, ya que ella misma ha reconocido que padece una y, precisamente de ahí, su pasión por la natación.

Insignias por sus trayectorias como falleras

Por su parte, Paula Nieto ha sido elegida fallera mayor infantil de Valencia para la próxima edición. Con once años y siendo miembro de una céntrica comisión, estudia sexto de Primaria en los Jesuitas.

Su amor por las Fallas, a pesar de su juventud, ya le viene de lejos. De hecho, sus padres le dieron de alta en el censo de la Junta Central Fallera (JCF) con tan solo dos años, aunque previamente ya se había puesto la típica indumentaria local.

Apasionada del baile, a la recién designada fallera mayor infantil de 2023 le encanta practicar, ‘fit kid’, una modalidad de este deporte que combina la danza con ejercicios de gimnasia.

Al pertenecer durante determinado tiempo a una misma comisión, ambas nuevas falleras mayores poseen los llamados ‘Buñuelos’, las insignias que concede la JCF a los miembros ilustres. Así, al estar apuntada al menos cinco años, Nieto tiene el ‘Buñuelo de Plata’, mientras que a su compañera en el reinado fallero, Mengó, le entregaron el ‘Buñuelo de Oro’, debido a que lleva más de diez años como fallera.

La emoción es una constante durante la Ofrenda a la Virgen de los Desamparados.

La emoción es una constante durante la Ofrenda a la Virgen de los Desamparados.JCF

A partir de ahora, tanto a nivel institucional como cada una de los cientos de comisiones falleras en Valencia y su área metropolitana comienzan una serie de actos con vistas no a marzo, sino a febrero. A finales de ese mes tiene lugar la ‘Crida’ (la Llamada), en el que las falleras mayores se dirigen a los valencianos a los pies de las Torres de Serranos y al mundo entero para que disfruten de la fiesta.

A partir del día 1 de marzo y hasta el 19 cada día a las 14 horas en punto la plaza del Ayuntamiento vibra con la mascletà, cuando cientos de kilos de pólvora estallan en algo más de cinco minutos.

Ya en la semana grande, los castillos de fuegos artificiales también son protagonistas, especialmente la ‘Nit del Foc’ (Noche del Fuego). Después de que la Fallera Mayor le entregue su ramo de flores a la Virgen de los Desamparados y haya concluido la Ofrenda, se dirige al antiguo cauce del río Turia y, tras dar la orden al pirotécnico, este dispara 4.000 cohetes que iluminan el cielo de Valencia.

Finalmente, en la noche de San José, todos los monumentos arden, poniendo en valor la tradición y lo efímero. Solo un ‘ninot’ (muñeco fallero’ se salva de las llamas. Y, justo cuando los bomberos apagan el fuego, comienzan de nuevo las Fallas.

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