Comunidad Valenciana Puig despide a otro profesor por no tener título de valenciano
El violinista Ángel Sampedro, con amplia experiencia, cuenta con un gran prestigio internacional
La Consejería de Educación del Gobierno Valenciano, en manos de Compromís, lo ha vuelto a hacer. Al igual que ocurrió con la profesora de música de trompa Encarna Grau, el Ejecutivo presidido por Ximo Puig ha despedido a un nuevo docente por no tener un título oficial que acredite sus conocimientos de valenciano, lo que se ha venido a llamar el «requisito lingüístico».
En esta ocasión, el damnificado ha sido Ángel Sampedro, un profesor de violín del Conservatorio Salvador Seguí de Castellón, con una amplia trayectoria que la avala y de más que reconocido prestigio mundial.
Entre sus logros, Sampedro creó en 2003 la compañía El Arte Mvsico, que junto a sus compañeros Teresa Casanova, Diego Fernández e Isabel Gómez-Serranillos recrean representaciones históricas de la música de los siglos XVII y XVIII.
Durante 2003, el músico ostentó la dirección de la Orquesta Barroca del Conde Duque (Madrid), a lo que le siguieron trece años al frente de la Orquesta Barroca de la Universidad de Salamanca, con la que ha viajado por toda España y Europa.
La especialización que realizó en Países Bajos sobre música antigua le ha valido para mostrar su talento, además de en el país centroeuropeo, en otros como Francia o Italia.
Fundó escuelas musicales en Bolivia
Además de numerosos discos, espectáculos y musicales, Sampedro imparte cursos sobre su especialidad en diferentes conservatorios nacionales y extranjeros y fue parte activa junto con la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) en la creación de diferentes escuelas de música barroca en Bolivia.
En Salamanca, junto a dirigir la Orquesta Barroca de la Universidad, fue uno de los profesores fundadores de su academia. Así, también tiene el título de catedrático de violín en el Conservatorio Superior de Música de Castellón.
Sin embargo, todos esos méritos profesionales y académicos no le han servido para poder seguir impartiendo clases a sus alumnos, quienes, tras el despido de Sampedro, tienen más cualificación musical que su sustituto, aunque este sabe valenciano.
En reacción al despido del prestigioso músico, la asociación Hablamos Español ha mostrado en una carta dirigida a la consejera valenciana de Educación la «indignación social» derivada de prescindir de Sampedro «a causa de un requisito lingüístico».
En esta línea, define al damnificado como «un brillante músico», destacando su prestigio internacional, a quien sus alumnos «echan ahora en falta».
En su misiva a la titular del departamento que ha procedido al despido, la presidenta de la asociación, Gloria Lago, le pregunta si se puede «prescindir de una persona de esta valía por no tener una titulación de nivel C1 en valenciano, que hasta ahora no necesitó para ser un profesor excelente».
Asimismo, Lago le pide a la consejera que las condiciones «para acceder a plaza de docente sean revisadas» y que el nivel del requisito acabe «moderándose» porque en muchos casos «supone una barrera infranqueable para profesores que tienen mucho que aportar».