Un submarinista muestrea el crecimiento de las praderas de Posidonia oceánica en la Comunidad Valenciana
El bosque submarino que crece bajo las aguas valencianas
Las praderas de posidonia oceánica presentan un incremento de su densidad desde hace 20 años en los espacios marinos protegidos del litoral valenciano
Las praderas de posidonia oceánica presentan un incremento de la densidad y cobertura de los haces en los espacios marinos protegidos del litoral valenciano según el informe que la Consejería de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio de la Generalitat Valenciana ha presentado recientemente para analizar su estado en el litoral de la Comunidad Valenciana.
El director general de Medio Natural y Animal, Raúl Mérida, ha explicado que «los trabajos de seguimiento se han centrado en espacios marinos protegidos, los denominados Lugares de Importancia Comunitaria (LIC), incluyendo tanto los de competencia autonómica como aquellos de competencia estatal».
En conjunto, estos LIC marinos se distribuyen en las tres provincias desde el Prat de Cabanes hasta Cabo Roig y en ellos se han establecido hasta 30 estaciones de seguimiento.
El director general ha hecho hincapié en la importancia de este tipo de trabajos ya que «las praderas de posidonia oceánica constituyen unos de los ecosistemas marinos más espectaculares de nuestras costas: son auténticos bosques submarinos, que sustentan una gran biodiversidad de flora y fauna y tienen una productividad elevadísima que supone una significativa producción de oxígeno, así como la absorción y efecto sumidero de dióxido de carbono».
Medición del crecimiento de posedonia oceánica en aguas valencianas
Medición del crecimiento de posedonia oceánica en aguas valencianas
El informe, elaborado en base al seguimiento realizado por el Institut d'Ecología Litoral (IEL), se enmarca en el programa POSIMED y ha incorporado datos de los muestreos que siguen protocolos estandarizados. «Se toman –como parámetros principales del estado de las praderas– la densidad, lo cual refleja algo así como espesura y su vitalidad, y el grado de cobertura, que se refiere a su relación respecto a otros tipos de fondos, tanto arenosos o rocosos e incluso en relación con los fondos con restos de pradera muerta o muy degradada. Ambos datos permiten evaluar, de manera general, la densidad global de cada pradera», ha expuesto Mérida.
«El análisis de los datos ha mostrado que la densidad de haces de las praderas de posidonia oceánica se encuentra en un estado positivo y con buena perspectiva futura, al menos a corto plazo y en la mayor parte de los LIC», ha añadido.
Evolución del crecimiento de la posidonia en la Comunidad Valenciana
La mitad de los LIC se encuentran en buen estado de conservación de las praderas como en la Almadraba, Sierra Helada, Marina Baja, Cap de Les Hortes, Tabarca, Montgó e Ifac. También en Prat de Cabanes-Torreblanca y Cabo Roig, aunque con tendencias positivas, menos marcadas.
La posidonia oceánica contribuye a la estabilidad de los fondos someros y, en particular, de las costas con playas. Desde la Unión Europea está considerada como hábitat prioritario y es objeto de particular protección tanto por la normativa europea como autonómica.
