Una mujer se somete a una mamografíaAscires / Europa Press

Comunidad Valenciana

Mazón investiga irregularidades y retrasos masivos en las pruebas de cáncer de mama durante la época de Puig

Sanidad ha detectado retrasos de hasta cuatro años en la primera citación a entre 150.000 y 200.000 mujeres

El Gobierno de Carlos Mazón ha ordenado la intervención de los servicios de Inspección de la Generalitat Valenciana para realizar una evaluación exhaustiva de la gestión de la Dirección General de Salud Pública durante los últimos años del Gobierno de Ximo Puig. Sanidad ha encontrado irregularidades que desembocaron en retrasos en la detección precoz del cáncer de mama de hasta cuatro años que afectaron a entre 150.000 y 200.000 mujeres.

El consejero de Sanidad, Marciano Gómez, que ha presidido una reunión con miembros de la Inspección General de Servicios de la Generalitat y de la Inspección Sanitaria de la Consejería, ha afirmado que los informes «evidencian el abandono de los programas de cribado de cáncer de mama y colon en los últimos años».

En el caso del programa de detección precoz de cáncer de mama, se ha detectado, entre otros aspectos, un grave déficit de inversión en mantenimiento y renovación de mamógrafos obsoletos, lo que supone múltiples fallos en el funcionamiento de los equipos que obligan a paralizar la actividad de la Unidad de Prevención de Cáncer de Mama (UPCM) afectada en cada fallo.

Asimismo, existe un alarmante déficit de personal, ya que la plantilla estructural actual cuenta con sólo 15 radiólogos en activo para las 24 UPCM, que atienden alrededor del 35 % de las lecturas anuales de mamografías. Durante los últimos ocho años no se ha dado cobertura, ni se ha establecido reorganización alguna del programa para cubrir la necesidad del mismo y más del 60 % de las lecturas se realizaban por el personal de plantilla en jornada extraordinaria.

En definitiva, durante la época del tripartito de PSPV, Compromís y Podemos se dejó al programa sin regulación específica sobre la gestión de su actividad de lecturas de mamografías y su correspondiente retribución.

«Discordancia orgánica y funcional»

Gómez también ha señalado que la Consejería ha detectado «una absoluta discordancia orgánica y funcional en el programa de cribado de mama, que gestionaba al personal de las UPCM a través de los departamentos de salud». El mestizaje del Botánico provocó la decadencia de este programa, convirtiéndose entonces en un programa pionero y referente nacional en la detección precoz del cáncer de mama.

En la actualidad, con la entrada en vigor del Acuerdo de 30 de enero de 2024, del Consell, por el que se habilitan programas específicos de productividad para atender necesidades coyunturales de actividad asistencial y preventiva, se ajusta el programa de cribado de mama a la normativa vigente en cuanto a los modelos retributivos y a la jornada máxima anual del personal de instituciones sanitarias

Asimismo, la actividad de las nueve UPCM sin radiólogos lectores asignados se deriva a las unidades de radiología de hospitales mientras se reestructura y redimensiona el programa y su dotación de personal. A este respecto, el consejero de Sanidad ha anunciado que el nuevo equipo de la Consejería «trabaja desde hace meses en la reorganización de procesos y en la incorporación de tecnología e innovación, con la finalidad de recuperar el programa de detección precoz de cáncer de mama y alcanzar un modelo eficaz y eficiente que garantice las coberturas, así como en la renovación de equipamiento».

Castellón, sin colonoscopias

Por otra parte, la información recopilada pone de manifiesto que el Botánico dejó a los departamentos de salud de Castellón y La Plana sin colonoscopias del programa de cribado de cáncer de colon desde mayo de 2022, a pesar de continuar remitiendo invitaciones para participar en el programa.

En este sentido, no fue hasta octubre de 2022 cuando la Consejería de Sanidad decide externalizar más de 1.000 colonoscopias pendientes acumuladas en Castellón, a pesar de que ya en mayo existe constancia oficial del cese en la realización de pruebas de confirmación diagnóstica de cribado. «Ante la incapacidad de gestión de los responsables de la Consejería en ese momento, al no ser capaces de activar la realización de colonoscopias en los hospitales públicos, el Botánico recurrió, una vez más, a su tan denostada sanidad privada», ha aseverado el consejero.

Cabe señalar que, a pesar del cese total de la realización de colonoscopias del programa de cribado en Castellón en mayo de 2022, la Dirección General de Salud Pública continuó invitando a la participación en el programa y, por tanto, acumulando una bolsa de pruebas diagnósticas pendientes, que en julio de 2023 ascendía a cerca de 700.

El nuevo equipo de la Consejería ha trabajado para reactivar el programa en la provincia de Castellón y lo ha incentivado con la incorporación al mismo del Hospital General de Castellón y el Hospital de La Plana para la realización de estas pruebas diagnósticas de cribado, que hasta el momento en que se confirma el cese total de la actividad sólo hacía el Hospital Provincial de Castellón.

El consejero de Sanidad de la Generalitat Valenciana, Marciano Gómez (centro)GVA

En la actualidad, los tres hospitales realizan una media de 60 colonoscopias semanales del programa de cribado. Han pasado de no hacer ninguna desde mayo de 2022 a reactivar el programa a buen ritmo con la finalidad de descongestionar la bolsa de demora acumulada y alcanzar la cobertura adecuada lo antes posible.

El consejero de Sanidad ha puesto en valor que estos hospitales están realizando «un gran esfuerzo y una excelente labor coordinada desde Consejería para asumir la reactivación del programa y la bolsa de pruebas acumulada».

En cuanto al procedimiento de este programa, la persona en edad (50-69 años) es invitada por la Consejería a participar en el programa de cribado, recibe una carta y el test o prueba de cribado que tiene que realizarse en su domicilio. Se trata de una prueba que consiste en el análisis de una muestra de heces para detectar la posible presencia de sangre (test de sangre oculta en heces de tipo inmunológico cuantitativo). Esta prueba de cribado se realiza cada dos años. Asimismo, una vez realizado el test, en caso de resultar positivo, se ofrece la realización de una colonoscopia óptica, que es la prueba que puede confirmar el diagnóstico de lesiones como pólipos o cáncer de colon.

Sin cribados de Cérvix

Respecto al programa poblacional de cribado de cáncer de cérvix, dirigido a las mujeres de entre 25 y 65 años, actualmente la Dirección General de Salud Pública está trabajando para su puesta en marcha de forma progresiva. El Botánico anunció en febrero de 2023 que tras el verano arrancaría el programa para empezar a hacer las pruebas en 2024 pero la realidad es que no dieron ni un solo paso para hacer posible su implementación en plazo.

En 2019 se incorpora el Programa de Prevención de Cáncer de Cérvix Poblacional en la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud, con la indicación del Ministerio de Sanidad de que deberá instaurarse en un periodo de 5 años, y llegar a una cobertura del 100 % en el plazo de 10 años. Desde entonces, no sólo es que la planificación del Botánico fuera agotar el plazo, sino que el nuevo equipo de la Dirección General de Salud Pública se ha encontrado con que no están desarrolladas las herramientas básicas para su puesta en marcha, como es el sistema informático que debe recoger la información asociada al cribado.

Una vez más, se anunció una iniciativa sobre la que después no se llevaron las acciones necesarias, a pesar de la obligación de incorporar este cribado a la cartera de servicios en el plazo establecido.

«En este punto, la Consejería está trabajando ahora de manera intensiva en el desarrollo de ese sistema de información, imprescindible para poder comenzar la implementación del programa lo antes posible», ha concluido el consejero.