Cristóbal Aguado: «Sánchez es el único presidente europeo que no ha ido a Bruselas a defender al campo»

El sector agrario ha dado un paso adelante con la organización de multitud de acciones de protesta ante un contexto en el que la inflación y la importación de productos procedentes de países como Marruecos, Egipto, Turquía o Sudáfrica les están llevando a una situación insostenible.

Para analizar esta problemática y otros asuntos relacionados con el mundo del campo como la sequía y la necesidad de trasvases, el presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), Cristóbal Aguado, atiende a El Debate.

–¿Cómo valora estos días y semanas en que muchos agricultores han hecho tractoradas tanto en España como en Europa?

–La burocracia está propiciando que haya una especie de revuelta europea. El detonante empezó en Alemania porque su gobierno, a diferencia del español, había decidido quitar la subvención al gasóleo profesional del campo. La nueva PAC es muy burocrática. Tenemos que fotografiar todas las actividades y, en definitiva, hay muchas deficiencias en el campo que arrastrábamos y que ahora han sido la gota que ha desbordado el vaso. En España, como es lógico, la PAC nos resulta muy incómoda, gravosa, no se ajusta a la realidad. Hay una serie de ecorregímenes que son complementos para poder tener ayudas europeas, como dejar un manto verde, no poder trabajar la tierra nunca. Es una serie de impedimentos.

Dejar un manto verde en el campo es dejar la hierba crecer. Nosotros no somos como Europa, donde llueve todas las semanas. Aquí, especialmente en el Mediterráneo, podemos dejar un manto verde en invierno, pero cuando sale el invierno, si hay lluvia, tenemos que trabajar la tierra para mantener la sazón en todo el secano, olivos, almendros, viñas, etcetera.

En cuanto a la guerra en Gaza, se ha cerrado el Mar Rojo y todos los cítricos de Egipto, de Marruecos, incluso de Turquía, que salían por el Mar Rojo hacia toda Asia, ya no salen. Son productos perecederos, necesitan un viaje más corto y ahora se han desviado todos a España. Ha tenido una incidencia fuerte sobre España y está perjudicando todo el sector citrícola y hortícola español.

En definitiva, llevamos ya mes y medio con salidas a todos los sitios. Hemos hecho también tres manifestaciones en Bruselas, junto con todos los compañeros europeos. Eso ha permitido entrevistarse con el comisario de Agricultura y con la presidenta Von der Leyen.

Una cosa es complementar la demanda de Europa y otra es sustituir a los agricultores europeos con productos de fuera

–Tras este mes y medio, ¿qué han logrado?

–Las organizaciones agrarias ya tenemos tres reuniones de trabajo con el ministro de Agricultura y toda la plana mayor del Ministerio. Empezó poniendo dos cosas sobre la mesa y ahora ya hay 18 puntos en negociación. Estamos hablando de reducir burocracia, de mejorar el seguro, de mantener el gasóleo, de mantener los módulos e incluso aumentarlos, de incentivar la entrada de jóvenes, de hacer inspecciones en cadenas comerciales por el tema de la trazabilidad, modificar la cadena, la ley de la cadena alimentaria para fortalecerla y una serie de situaciones puntuales que son todas las que están en marcha.

–En concreto, ¿a qué aspiran ahora?

–A que todo lo que ha dicho el Ministerio se plasme por escrito, haya planes de inversión importantes sobre el seguro agrario, se hable de ampliación de coberturas, que se ponga dinero, al menos 300 millones de euros, solo para el seguro agrario. Y, cómo no, que dejen de hacerse las fotografías referenciadas de toda actividad que hagamos en el campo.

No podemos ser fotógrafos continuamente. Para eso está la tecnología. Están los radares, los satélites y está todo. Lo tienen todo fotografiado cuando quieren. Pueden leer una matrícula en una carretera y te pasan la denuncia. Pues en el campo es exactamente igual y queremos que utilicen la tecnología. Estamos pidiendo simplificación de la burocracia y que el cuaderno digital retrase su entrada en vigor porque no están viendo la media de edad que hay en la Comunidad Valenciana, es decir, superior a 64 años. La gente no tiene ese nivel de conocimiento de las cosas digitales como piensa el Ministerio.

Política rural ideologizada

– ¿Y a nivel internacional?

–También pedimos reciprocidad en los acuerdos internacionales con países terceros, que se renegocien porque la situación ha cambiado. Una cosa es complementar la demanda de Europa y otra es sustituir a los agricultores europeos con productos de fuera. Por tanto, no queremos que se firmen acuerdos internacionales en más países que contemplen siempre el sacrificio de la agricultura europea como moneda de cambio. Hemos llegado al punto que no tenemos materias activas para combatir determinadas plagas, pero esos productos sí existen y se están utilizando fuera de Europa. Eso genera una diferencia de capacidad productiva, de mantenerse en el mercado a un precio digno, porque nos hunden a nosotros beneficiando a terceros. Y, naturalmente, también pedimos que el presidente del Gobierno de España vaya a Bruselas como ha ido Macron y todos los presidentes de Europa.

El Ministerio de Transición Ecológica es el de la intransigencia económica

–¿Cree, entonces, que pudiera haber una especie de dejación de funciones?

–El ministro de Agricultura está yendo a Bruselas, está asistiendo a Consejos de Ministros de Agricultura, pero ante esta respuesta masiva que ha habido en toda Europa, el único presidente que no ha ido a Bruselas es el presidente de España. Se fue a Marruecos y además a financiar proyectos también con dinero europeo y español. Se fue a Brasil, pero no ha ido a Bruselas y su trabajo está en sus ciudadanos, en estar donde toca y donde van los demás presidentes europeos. En el Consejo Europeo están los presidentes de gobierno y queremos que sea una persona visible, porque la respuesta del ministro cuando se lo hemos exigido es que el presidente también ha enviado una carta. A mí me parece muy bien que envíe cartas a Europa, pero creo que con lo que ha gastado el Falcon también puede ir a Bruselas. Con el avión se ha ido a Marruecos y Brasil.

–¿Piensa que Pedro Sánchez ha priorizado otros países y ha dejado de lado la agricultura?

–A Brasil se ha ido a otros negocios y a Marruecos ha ido a dar dinero en un momento en que necesitábamos que estuviera en Bruselas, junto con otros presidentes de Europa y acogiendo a la presidenta de Europa, diciéndole dónde nos duele el zapato con el tema del agua, que en Europa nos miran de reojo, y queremos que quede resuelto. El agua es esencial para el futuro de la agricultura y tiene que estar almacenada.

Si en algún barranco hay algún dique quieren quitarlo. Al final quieren que quitemos pantanos y dicen que el agua debe circular libremente, como era hace 20.000 años. Pero hace 20.000 años éramos tres docenas en España y ahora somos 45 millones. Y tienen que comer y beber y en verano vienen 30 millones o 40 más de turistas. Y todos quieren beber y comer productos. O sea, el mundo no es lo que era en la prehistoria. El mundo es el que es en el siglo XXI y en Europa no pueden hacer la misma norma para todos los países porque no tienen nada que ver. También está el Ministerio de la Transición Ecológica, que es el de la intransigencia económica. Creo que no ha recibido todavía a ninguna organización agraria en años y eso demuestra un cansancio de todo el sector agroalimentario español, porque ve que la intransigencia no es buena y el ecologismo radical no es bueno. No hay más ecologista que los agricultores.

–¿Cómo cree que pueden afectar al sector las elecciones europeas del próximo 9 de junio?

–Decimos a los partidos políticos que queremos que de cara a las elecciones en Bruselas vayan expertos en agricultura. Porque si hay un experto en agricultura en el Parlamento Europeo indudablemente podrá hablar con conocimiento de causa y defender mucho mejor a un sector que si no tiene ninguna idea solo toca el arpa de oídas. Eso es lo que estamos haciendo y por eso estamos exigiendo a los partidos también en este contexto de movilización que cuando un país tiene a varios eurodiputados de diferentes partidos que entienden de lo que le aprieta el campo y se ponen de acuerdo, la potencia y el peso específico de ese país es muy superior.

Trasvase Tajo-Segura

–Y hoy día, ¿cuáles son los cultivos que más dañados están por las importaciones de terceros países?

–Hace días denunciamos una partida de fresas que se ha visto que había entrado en Europa y a través de España por Algeciras y se había detectado que tenía el virus de la hepatitis A. Eso es preocupante porque aunque ellos escurren el bulto, fresas contaminadas con hepatitis es peligroso. También se están viendo perjudicados todo tipo de hortalizas y, cómo no, las frutas. Europa ha firmado multitud de acuerdos y el impacto lo estamos sufriendo en este momento. La cotización de los cítricos, que es nuestro producto estrella, ha caído de una forma bastante importante y no hay un precio justo.

–¿Considera que la política rural por parte del Gobierno y Bruselas está ideologizada?

–Efectivamente, llevamos ya al menos 15 años y así lo estamos denunciando. Se ha dejado de priorizar el sector rural y los productos alimenticios. Están sacrificando la agricultura europea, perdiendo la garantía alimentaria que tiene que tener Europa ante cualquier tipo de conflicto que se genere. Y se están olvidando de que el que se va del campo no vuelve.

Esa es una situación verdaderamente preocupante y dar la espalda al campo como lo está haciendo Europa en este momento es una auténtica desconsideración. Es lamentable la cantidad de suicidios que está habiendo en el sector agrario europeo. Francia es el número uno en suicidios, pero España no va muy lejos y esto es inadmisible. Somos la región europea que más tierras de cultivo tiene abandonadas. Una de cada cinco hectáreas está abandonada. Si no modifican esta PAC, posiblemente se convertirá en dos de cada cinco.

–En cuanto al trasvase Tajo-Segura, ¿cree que hay opciones de que se revierta el recorte?

–Lo dudo con los políticos actuales, aunque espero que el sentido común llegue porque la ministra de la intransigencia lo que quiere es que el agua se vaya al mar. Esto es algo que no tiene sentido. Hay que guardar el agua que se tiene. Si tienes capacidad de almacenamiento y vías de comunicación, autopistas del agua, puedes trasladar el agua donde hace falta de forma que todo transcurra con equilibrio. El Tajo envía muchísimos hectómetros a Portugal por el mar. En el Ebro, por no almacenar arriba, la dejan ir hacia abajo y se va al mar una cantidad importante. Los caudales ecológicos no son científicos, son caprichosos. España necesita hacer un alto en el camino, una reflexión. El agua no es patrimonio de nadie.

El agua cae y la orografía la conduce donde está. Pero el agua es de todos los españoles y tiene que almacenarse toda la posible y distribuirse adecuadamente. Igual que distribuimos el agua potable, igual que hacemos vías de tren para comunicar toda España, igual que hacemos todo tipo de actuaciones, de construcciones, de comunicaciones, porque hasta los aviones tienen sus líneas en el aire tratadas para la coordinación y la comunicación. Pues con el agua es lo mismo.