¿De dónde proviene el nombre de Castellón de la Plana?
La ciudad tiene su origen en el siglo XII y ha sufrido cantidad de transformaciones en la nomenclatura gracias a la rica historia que tiene detrás y que se remonta a la Edad Media y la reconquista de Jaime I
La historia detrás del nombre de la ciudad de Castellón de la Plana, de raíces latinas, se remonta siglos atrás, a la época medieval. Su nomenclatura está ligada a su rico legado, que pasa por la reconquista del rey Jaime I de Aragón hasta la guerra entre los Isabelinos y los Carlistas, apareciendo el nombre oficial de la ciudad por primera vez escrito en 1290, en el siglo XIII.
El latín es el origen de muchos de los nombres propios de ciudades y pueblos de la época medieval, como en este caso. Castellón se originó a raíz de Castelli+lone, que significa «castillo pequeño», aunque el nombre fue derivando en diferentes variantes, como Castellum, que derivó en Castrum» añadiendo el sufijo del diminutivo -ellum.
El origen de este nombre es debido al castillo que protegía a la población primitiva situada en el cerro de la Magdalena y fue heredada por el nuevo asentamiento, cuando se autorizó su traslado a la Plana.
Más de ocho siglos de historia
La construcción gramatical tuvo diversas escrituras, dependiendo del momento histórico y cultural que la ciudad estuviese pasando en ese momento, como Kastilgón, Castilgone ripa de mare, Castilion o Casriliones. Pero fue concretamente el 31 de agosto de 1290 cuando aparece «Castelló» por primera vez escrito en valenciano.
La historia del nombre está vinculada a la Reconquista, cuando las fuerzas cristianas recuperaron las tierras de esta región de los musulmanes. En 1251, el Rey Jaime I de Aragón otorgó una carta puebla, un documento que concedía ciertos privilegios y derechos en la época, para fundar una nueva villa en la llanura, desplazando a la población desde una colina cercana donde había un castillo, llamado el Castell Vell o «Castillo Viejo».
Este movimiento permitió a los habitantes establecerse en tierras más fértiles y accesibles para la agricultura y el comercio, por lo que el 8 de septiembre de 1251 es considerada la fecha de fundación del asentamiento urbano actual.
La necesidad imperiosa de distinguir esta población de otras de los mismos dominios reales llevó a la Cancillería Real a crear diversas variantes como las de Castelló de Borriana o Castelló del Camp de Borriana, pues Burriana era la principal localidad de la zona, utilizadas entre 1244 y 1339. Es durante el siglo XV cuando aparece la forma Castelló a secas o como Vila de Castelló.
En 1308 es cuando aparece por primera vez escrito el apellido «de la Plana» junto al nombre de la ciudad de Castellón. La villa era capital de la Gobernación, más allá del río Uxó, también conocida como de la Plana, pero hasta el siglo XVI no se hace habitual. En su crónica, el autor Rafael Martí de Viciana propone el nombre de «Castellón el Grande», pero sin que la idea tuviera más relevancia.
La guerra entre isabelinos y carlinos también formó parte de la historia de la ciudad de Castellón. El 4 de noviembre de 1837 la reina Isabel II concedió a Castellón el título de ciudad después de haber resistido a un asedio de tres días por las tropas carlistas. Desde ese momento histórico, Castellón pasa de ser un pueblo o villa a ser considerada ciudad y capital de la provincia.
Castellón con 'N'
La primera referencia al uso de Castellón con la «N» al final se tiene en 1609, en un documento censal escrito en castellano, pero su uso no es habitual hasta la promulgación de los Decretos de Nueva Planta. Durante el siglo XVIII es cuando se viene imponiendo la forma Castellón de la Plana en la documentación oficial.
En 1982 el municipio pasa a denominarse Castellón de la Plana y Grao de Castellón/Castelló de la Plana y Grau de Castelló, abandonando la versión monolingüe en castellano del nombre e incorporando la referencia al distrito marítimo. De nuevo en 1986 se cambia el nombre oficializando la denominación bilingüe en castellano y en valenciano Castellón de la Plana/Castelló de la Plana.
Tras la aprobación previa por parte del Ayuntamiento de Castellón de la Plana y la Academia Valenciana de la Lengua el 22 de marzo de 2019, el Consejo de la Generalitat Valenciana ratificó el topónimo oficial y único en valenciano de Castelló de la Plana, abandonando así la doble denominación. El 15 de abril de 2019 cuando se publicó en el Boletín Oficial del Estado y el cambio en el topónimo se hizo oficial.
El 30 de noviembre de 2023, la Corporación municipal electa en mayo de ese año, compuesta por el Partido Popular y Vox, impulsó el procedimiento para recuperar la denominación oficial de la ciudad en formato bilingüe. De acuerdo con la legislación vigente, para que se oficialice la denominación ha de cumplirse un procedimiento legal y administrativo, que conlleva otras tres aprobaciones en el Pleno municipal, informes de la AVL y la aprobación por parte del Consejo de la Generalidad hasta ser finalmente publicado en el BOE.
Actualmente, el Ayuntamiento de Castellón ya ha avanzado a pasos agigantados sobre el cambio del topónimo y en el pleno ordinario del mes de mayo ha aprobado el informe que avala la denominación del municipio en su forma bilingüe. Esto ha sido gracias al informe técnico detallado con fundamentos históricos y lingüísticos emitido por el catedrático y experto en Lingüística, Santiago Fortuño.