Las 'dos Españas' concentradas en el pueblo más pequeño de la Comunidad Valenciana tras las elecciones del 9-J

Si algo han dejado las elecciones europeas del 9-J, además de una clara victoria del Partido Popular en prácticamente toda la Comunidad Valenciana, son algunas sorpresas. Castell de Cabres, el pueblo más pequeño de las tres provincias valencianas, con tan solo 19 habitantes censados y situado en Castellón, ha vuelto a dar que hablar en unas elecciones.

Además de por el número de habitantes, la pequeña localidad del Bajo Maestrazgo que colinda con Teruel, destaca por su plano político. Al contar con tan solo ocho mujeres, 11 hombres y un menor de edad censados, siempre da que hablar cuando hay elecciones, incluso en las europeas.

El resultado del 9-J en Castell de Cabres ha sido bastante peculiar, incluso inédito. Vox y Podemos han empatado a votos, y además, ha habido representación en las urnas para muchas de las opciones que se postulaban, dejando así una gran diversidad en los tan solo 15 votos contabilizados.

Han sido tres votos para Vox y otros tres para Podemos, empatando así dos grandes fuerzas completamente opuestas. Además de dos votos a PSOE, PP y Compromís, otras opciones muy diversas como Pueblos de España/Partit Comunista del Poble de Catalunya (PCPE/PCPC), Existe y Soberanía Alimentaria Española (SAE), también han sumado papeleta.

Otra curiosidad a resaltar de esta jornada electoral en Castell de Cabres es el alto porcentaje de participación. La abstención ha sido otra de los claros protagonistas en todo el país, y también en la Comunidad Valenciana, donde la participación ha sido del 53,6 %. Teniendo en cuenta que de los 19 habitantes censados que son mayores de edad en la localidad han votado un total de 15, la participación ha sido del 78,9 %, una cifra muy superior a la media en toda España.

Gobierno asambleario

Las elecciones europeas no son el único punto curiosos a destacar en la política de Castell de Cabres. Además de ser el municipio más pequeño de la Comunidad Valenciana, es el único en las tres provincias que se rige mediante un Concejo abierto, y de los pocos que quedan en toda España con este sistema.

Este modelo político es un sistema de organización municipal al que solo pueden optar pequeños municipios con menos de 100 habitantes censados. Se rigen por un sistema asambleario que hace a la vez de Pleno del Ayuntamiento. Son los vecinos los que toman las decisiones en lo que algunos denominan como «democracia auténtica».

Además de la elección directa del alcalde o alcaldesa del municipio, lo más significativo de este modelo es el funcionamiento de la Asamblea. Está compuesta por todos los electores del municipio, que no tienen condición de cargo electivo, aunque sí deben abstenerse en los debates o votaciones de los asuntos en los que ellos estén relacionados. Los acuerdos se adoptan por mayoría simple: más votos afirmativos que negativos.