Luis Oliver, párroco de Benicasim, a la derecha de la imagenEl Debate

Castellón  El Ayuntamiento de Benicasim impulsa la iglesia dedicada a san Juan Pablo II pese a la oposición del PSOE

El pleno de presupuestos ha aprobado finalmente la subvención de 80.000 euros destinados a las obras de la iglesia con el voto en contra de los socialistas

El famoso templo dedicado a san Juan Pablo II en Benicasim ya ve la luz al final del túnel. Tras más de 20 años con las obras paralizadas por la falta de presupuesto, el Ayuntamiento de la localidad, dirigido por Susana Marqués Escoín, del Partido Popular, destinará 80.000 euros a terminar la iglesia, a pesar de la oposición del PSPV-PSOE, que votó en contra de conceder la subvención en el pleno de presupuestos.

La subvención nominativa que otorgará el Ayuntamiento de Benicasim a la parroquia se distribuirá en dos años, los primeros 40.000 euros llegarán en 2024 y los otros 40.000 restantes, en 2025.

El convenio que firmará el Consistorio se ha aprobado en el pleno a pesar de la negativa de los socialistas. Una decisión muy criticada por la oposición, que no ha querido dar su apoyo a destinar dinero público a estas obras.

«Ladrillos de fe»

A principios de este 2024 es cuando la primera fase de las obras del templo de san Juan Pablo II comenzaron tras más de dos décadas paradas. Un avance que no se podría haber llevado a cabo sin la implicación de la parroquia santo Tomás de Villanueva en Benicasim y el impulso del obispo de la Diócesis de Segorbe-Castellón, Mons. Casimiro López Llorente.

Debido a la falta de presupuesto para llevar a cabo esta restauración, las diferentes entidades religiosas movieron los primeros hilos para tratar de recaudar el máximo dinero posible con la campaña «ladrillos de fe».

Futuro templo dedicado a San Juan Pablo II en Benicasim, CastellónParroquia Santo Tomás de Villanueva, Benicasim

A través de donaciones de 10 euros, los participantes podían adquirir uno de los ladrillos del cerramiento del edificio y por una donación más significativa, de 50 euros, uno de los cubos que están dando forma a las torres del campanario.

También se podía colaborar adquiriendo karolinos, el dulce polaco preferido del Papa san Juan Pablo II, en una de las panaderías tradicionales de la localidad, en José María Benicasim. Por cada unidad, valorada en dos euros y medio, se destina uno a la construcción del templo.

A finales de 2022 es cuando comenzó a moverse el proyecto, que primero se presentó al Consejo Parroquial, que comprende la adaptación del templo existente con la incorporación de elementos simbólicos procedentes de la tradición de los templos cristianos.

Para las obras, el Obispado de Segorbe-Castellón aportará 350.000 euros de la primera fase, a los que se suman los 80.000 euros ya aprobados por el Ayuntamiento de Benicasim, más los 41.000 euros que se han recaudado hasta la fecha de enero de 2024.