Alicante abre la vía verde de la Cantera: un nuevo atractivo para los amantes del senderismo urbano

Alicante suma un nuevo atractivo a su impresionante catálogo turístico: la vía verde de la Cantera. Esta nueva infraestructura, abierta al público esta semana, es un proyecto ambicioso que transforma el antiguo trazado del 'Trenet' en un paseo peatonal y ciclista. Con una inversión de 1,9 millones de euros y quince meses de obras, se ha recuperado y renaturalizado un tramo histórico que ahora promete ser un punto de encuentro para senderistas, ciclistas y amantes de la naturaleza en la propia ciudad.

La vía verde aprovecha el antiguo corredor ferroviario que discurría paralelo a la avenida de Villajoyosa, pegado a la costa. Este trazado quedó en desuso en 2018 con la apertura de la variante ferroviaria del túnel de la Sierra Grosa, que conectaba las paradas de Sangueta e Isleta. Hoy, este tramo de 1,2 kilómetros se ha transformado en una extensión peatonal del paseo marítimo peatonal de la fachada litoral norte, proporcionando a los visitantes un acceso sin precedentes a un patrimonio ferroviario y ambiental único.

El recorrido comienza detrás del complejo Finca Adoc, atravesando el antiguo falso túnel hasta llegar a la actual parada del TRAM de La Isleta. Durante el paseo, los visitantes podrán disfrutar de vistas espectaculares de la bahía de Alicante, cruzando puentes, miradores y zonas de descanso diseñadas para peatones y ciclistas.

El proyecto no solo se centra en la apertura de un nuevo paseo, sino también en la recuperación y renaturalización del entorno. Se ha llevado a cabo un plan de restauración exhaustivo que incluye la rehabilitación de varios túneles históricos. En el túnel del Promontorio, se han realizado trabajos de rehabilitación de sillerías y reparación de patologías en hastiales y bóveda. El túnel Mirador también ha sido restaurado, con una reforma de su estructura interna y la mejora de la explanada contigua.

Uno de los puntos más destacados del proyecto es el túnel de Rocafel, donde se ha trabajado en la adecuación de la sillería de las embocaduras. Sin embargo, el tramo más largo y ambicioso ha sido el falso túnel de la Finca Adoc, de 320 metros. En este pasaje se ha rehabilitado el interior, permeabilizado y se han abierto huecos de ventilación y accesos transversales que permiten la entrada de luz natural y la ventilación adecuada. Además, se ha reurbanizado el apeadero, creando un área de descanso que conserva el carácter industrial ferroviario.

Nueva conexión urbana

La nueva senda no solo ofrece un paseo junto al mar, sino que también establece una importante conexión urbana. Comunica los barrios del norte de Alicante con los más céntricos a través de un itinerario no motorizado, sostenible y accesible. Esto facilita el tránsito seguro y ecológico para los residentes y visitantes que deseen moverse por la ciudad sin recurrir al automóvil.

Las vistas que ofrece este paseo son verdaderamente únicas. Desde varios puntos a lo largo del recorrido, los caminantes pueden disfrutar de panorámicas inigualables de la bahía alicantina que se complementan con la tranquilidad del entorno natural, creando un espacio para el esparcimiento y el ejercicio.

Recuperación de patrimonio ferroviario

Uno de los aspectos más significativos de este proyecto es la recuperación del patrimonio ferroviario de Alicante. Para su diseño se han reutilizado elementos históricos, como los postes de catenaria ferroviarios originales, que ahora forman parte del alumbrado público. Además, el balasto del ferrocarril se ha utilizado como material base para la pavimentación y acabado de la vía, integrando así elementos del antiguo tren en el nuevo sendero.

Esta intervención no solo preserva la «memoria histórica» del Trenet, sino que también la adapta a las necesidades contemporáneas, ofreciendo a los visitantes una mezcla de historia y modernidad. Es una manera de proporcionar a la ciudad una infraestructura tanto funcional como simbólica.