Una terraza del centro de ValenciaEFE

Catalá limita las zonas para nuevos pisos turísticos en Valencia pero descarta implantar una tasa

La alcaldesa levantina asegura que «no es el momento» de aplicar el impuesto, que a finales de 2023 fue derogado por la Generalitat a nivel regional, antes de que entrara en vigor

La gestión de la llegada masiva de turistas a determinadas zonas de España es un asunto que se ha ido generalizando en el debate público en ciudades como Barcelona, Mallorca, Ibiza, algunas islas de Canarias y no pocos municipios de la Comunidad Valenciana, más aún cuando el buen tiempo y las vacaciones de verano ya se están haciendo notar en hoteles, restaurantes y demás puntos de interés.

En el ámbito de la región, la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ya ha anunciado la toma de medidas por parte de su Ejecutivo con tal de que la temporada estival se pueda llevar a cabo con la mejor relación posible entre hosteleros, visitantes y vecinos.

Al respecto, la regidora ha anunciado que el Gobierno municipal llevará a la Comisión de Urbanismo del Consistorio la modificación del Plan Especial del año 2020 del barrio Ciutat Vella, que es pleno casco histórico de la capital del Turia, por la que «ya no se podrán hacer más apartamentos turísticos» en dicho distrito, a excepción de aquellos edificios destinados a uso exclusivo de pisos turísticos situados en la zona San Francisco (en la zona de El Pilar) y en la plaza del Patriarca, a dos minutos escasos andando desde la plaza del Ayuntamiento.

«Garantías y seguridad jurídica»

Así lo ha detallado la primera edil este lunes durante una visita a un edificio de la avenida de los Naranjos en la que ha avanzado esta medida, coincidiendo con su primer aniversario en el cargo. Así, ha sostenido que esta nueva ordenación responde al hecho de que un 10 % de las viviendas de Ciutat Vella está destinado a apartamentos turísticos, un porcentaje que le parece «equilibrado con respecto a la vivienda habitual». Por ello, a excepción de los dos puntos mencionados, «en el resto de los barrios de Ciutat Vella, el resto de la Xerea, el Pilar o la Seu, por ejemplo, ya no se podrán hacer más apartamentos turísticos», ha señalado.

En esta línea, Catalá ha subrayado que la ordenación local «precisa una nueva regulación que sea acorde a lo que nos han dictado también los tribunales» para que cuente con «la mayor de las garantías y la seguridad jurídica». Sobre esta tesitura, ha recordado que el Plan Especial de 2020 «fue llevado a los tribunales» y el Ayuntamiento «perdió el recurso», pues el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) «inhabilitó esa ordenación que se hizo en el PEP de los apartamentos turísticos». «En el año 2023 se estableció una moratoria de licencias, pero esa moratoria finalizará», ha apostillado.

Por tanto, la nueva regulación pasará, en primer lugar, por la Comisión de Urbanismo de este mes de junio. Posteriormente, se derivará el expediente a la Generalitat para que vuelva al Consistorio y sea aprobado por el Pleno municipal.

La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, presentando el Plan + Vivienda promovido por el Ayuntamiento levantinoJosé Jordán

Por otra parte, en cuanto a la moratoria general de licencias para la apertura de viviendas turísticas en Valencia, la alcaldesa ha defendido que su hoja de ruta busca «ordenar bien», «poner las reglas del juego claras» y «que haya seguridad jurídica para todos». «Lo que en ningún caso veo era el modelo anterior, sin ordenanza, sin inspecciones», ha afirmado, a la vez que ha señalado que su Gobierno municipal ha puesto en marcha cuatro equipos inspectores, ha realizado 300 inspecciones y ha decretado 200 órdenes de cierre.

El turismo legal necesita «un respiro»

La primera edil ha indicado que «lo que más preocupa en este momento» al Ayuntamiento es la «actividad irregular» de los apartamentos turísticos. «Si no regulas eso no puedes pedirle tampoco al sector legal, al que paga sus impuestos, exigencias», ha considerado, mientras ha insistido en que la ciudad «no tenía las reglas del juego claras» en cuanto a los apartamentos turísticos.

«Nosotros no estamos en contra de los edificios enteros de apartamentos turísticos. Ni siquiera estamos en contra de los apartamentos turísticos», ha manifestado Catalá, quien se ha posicionado «a favor del sector turístico». «Quiero ayudar al sector turístico a que aquí no llegue esa ola populista», ha incidido.

Finalmente, acerca de si es partidaria de instaurar la tasa turística, la 'popular' ha argumentado que «tiene que implantarse de forma coordinada y dialogada con el sector», algo que, ha lamentado, «no se hizo en su día», en referencia al impuesto aprobado por el anterior Ejecutivo autonómico presidido por Ximo Puig y que ha sido derogado por el actual Consell antes de su entrada en vigor: «Para mí no era el momento», ha añadido.

«La tasa turística, si llega algún día, llegará de acuerdo con el sector, pero no es el momento. Para mí no es el momento», ha remarcado, y ha asegurado que «siempre» pensó y sigue pensando «hoy» que «no se puede seguir gravando la actividad legal cuando no se persigue la actividad ilegal».

Catalá ha hecho hincapié en que la tasa turística «afecta a la actividad legal» y, a su juicio, «es el momento de perseguir la actividad ilegal y de regular bien el tema del turismo, los barrios e intentar ordenar la ciudad». De este modo, ha defendido que «no es el momento» y ha optado por su plan de que el sector hotelero «precisa un poquito de margen, un poquito de pulmón, un poquito de respiro». «Todos hemos sufrido y todo el mundo necesita su tiempo de recuperación», ha manifestado.

«Tiempo habrá para dialogar con ellos este tipo de medidas», ha agregado la regidora, sosteniendo que «no es un 'no' por sistema». «Es un 'no' en este momento y empezad por vuestro trabajo, que es lo que nos dicen, y perseguid la actividad irregular», ha concluido.